sábado, 15 de marzo de 2014

ANTOLOGÍA: LA SABIDURÍA DE EL LIBRO DE LOS ESPÍRITUS, DE ALLAN KARDEC


ANTOLOGÍA:
LA SABIDURÍA DE EL LIBRO DE LOS ESPÍRITUS,
DE ALLAN KARDEC

-Versión castellana y comentarios exegéticos de Giuseppe Isgró C.-


I. (1) Quién es Dios?

-“Dios es la suprema inteligencia, la causa primera de todas las cosas”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: En la primera edición de El Libro de los Espíritus la pregunta se formula tal como la hemos traducido desde la edición italiana, es decir: Quién es Dios?, en vez de: Qué es Dios, como se modificó en la segunda edición francesa y en todas las versiones a partir de entonces. Cuál de las dos formas es más acertada? Estimamos que ambos enfoques de preguntas son correctos, empero, la respuesta: -“Dios es la suprema inteligencia, la causa primera de todas las cosas”-, correspondería mejor a lo que es Dios. Ahora bien: “la suprema inteligencia” es un atributo que alguien posee; quién es ese alguien? Ese alguien es Dios. Entonces la respuesta a la pregunta: Quién es Dios?, debería ser: Dios, es el Ser Universal que posee la suprema inteligencia, y constituye, al mismo tiempo, la causa primera de todas las cosas-.
Como suprema inteligencia ha contemplado todas las variantes habidas y por haber en el eterno presente, sin límites de ninguna naturaleza.

Como causa primera de todas las cosas, constituye la fuente de donde emanan a la Conciencia, en un momento dado, todos los Espíritus de todos los seres en los tres reinos de la naturaleza, con individualidad claramente demarcada y con unos atributos que se corresponden, en forma análoga, a los atributos divinos poseídos por el mismo Ser Universal. En este caso tendríamos Seres individuales y un Ser Universal, formando una Unidad perfecta e indisoluble. Fueron creados esos seres individuales o siempre han estado en la fuente, y en un dado momento han emergido a la conciencia? Esto derivado de que la vida no se crea ni se destruye, simplemente existe. Emana a la Conciencia, en cada uno de los cuatro reinos naturales con una misión específica y en calidad de ejecutores de la Voluntad del Ser Universal; Él constituye el anhelo de ser, mientras que los seres individuales, -en los cuatro reinos- constituyen los ejecutores de dicha voluntad en todos los planos existenciales, en el eterno ahora.

La Conciencia de un Espíritu como ser individual, en los cuatro reinos naturales, nos aportaría la explicación de la creación de las formas materiales de la vida en todos los planos de expresión, así como de la creación de los mundos, su desarrollo y extinción, en incontables ciclos, los cuales, gradualmente, iremos analizando, buscando la percepción intuitiva más que percepción objetiva o razonamiento intelectual, lógicamente limitado. Es preciso centrar la atención en este enfoque para ir expandiendo la conciencia al respecto y la gradual percepción o darse cuenta de la realidad, siempre en expansión ilimitada.

La Unicidad de Dios: Hay un solo Ser Universal, o Creador. Pese a su emanación a la conciencia individual desde el Ser Universal, los seres individuales siguen conformando la Unidad con el Ser Universal, cuya emanación individualizada les faculta con el libre albedrío, les dota de los mismos atributos del Ser Universal, los cuales se corresponden con los valores universales. Además, cada ser individual esta dotado de una conciencia que constituye una réplica idéntica a la del Creador, por medio de la cual los seres individuales y el Ser Universal se comunican entre sí.

Cuáles son esos atributos divinos que los seres poseen en forma análoga a los del Ser Universal, en los cuatro reinos de la naturaleza, es decir: el humano, el animal, el vegetal y el mineral?

Cuáles son los nombres divinos del Ser Universal, que analizándolos o meditando sobre ellos, constantemente, permitan percibirle y conocerle?

Evidentemente, conociendo los atributos divinos en su totalidad o en parte, gradualmente, cada quien puede adquirir conciencia de ÉL, de acuerdo al propio nivel evolutivo.

II. (2) Qué debe entenderse por infinito?

-“Lo que no tiene ni principio, ni fin; lo ignoto. Todo lo que es desconocido es infinito”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: En el sufismo, se le asignan las siguientes dos características a Dios, -el Ser Universal: La primera, denominada "Qidám", es decir: -“Él es lo anterior a lo anterior. Él no se hizo. Él siempre fue“-. La segunda, con el término "Baqá'", que significa: -“Él es el después del después, Eterno; Él siempre será“-.

Dios, -el Ser Universal-, constituye uno de los mejores ejemplos de la características del término “infinito”, por su carácter atemporal y eterno, como lo expresa el “Quidam”: -”Él no se hizo”; simplemente era, es y será en el eterno presente.

La primera vertiente del término “infinito” se relaciona con el tiempo: por su condición de eterno presente el tiempo es eterno, por lo cual, constituye el segundo mejor ejemplo de “infinito”.

En la segunda, Dios es, también, infinito en la perfección y en el potencial de sus atributos. En el potencial, por cuanto, si bien Su perfección lo es en grado infinito, en lo relativo a Su capacidad creadora, desde el momento en que siguen emanando de Él nuevos seres a la conciencia individual, en los cuatro reinos naturales, la misma se encuentra, aún, en grado de potencialidad, infinita, sí, pero potencial, es decir, seguirá en Su rol Creador eternamente. Esta característica de potencialidad de su capacidad creadora dejaría de ser potencial si ya todos los seres que existirán, en el eterno presente, existieran ya, es decir, que no van a emanar más nuevos seres a la conciencia individual, a partir del Ser Universal. En este caso, todos los seres, en los cuatro reinos naturales, existirían desde siempre, junto al Creador Universal. Pero, su capacidad creadora de nuevas expresiones de vida tiene un potencial infinito aún en el caso de que, el Espíritu individualizado en el Alma Universal, y dentro de una unidad de ella, sea, como de hecho es, el Espíritu Universal del Creador. Con este enfoque, realmente, no habría creación de nuevos seres, ya que quien se encarna en “la unidad” del Alma Universal, en una expresión individualizada, -SER INDIVIDUAL- es el mismo Creador Universal, -sin dejar de ser Él, ni separarse de Él-, a partir de cuyo estado inicial empieza un proceso evolutivo potencialmente infinito y eterno. Pero, en cualesquiera de las formas que se quiera ver, siempre constituye un carácter potencial, en grado infinito, de su capacidad creadora. (Ver comentario exegético de la pregunta Nº 81).

Un tercer enfoque del término “infinito” se relaciona con el espacio. El espacio cósmico es infinito, caso contrario, -qué habría más allá del límite? Si hubiese un límite dejaría de ser infinito.

Dentro de la respuesta dada por los Espíritus al maestro Allan Kardec, se expresa: -“lo ignoto. Todo lo que es desconocido es infinito”-.

Esta parte de la respuesta, realmente, tiene dos vertientes: la primera, de carácter infinito; la segunda, expresa un límite o condición finita. Es decir, en realidad lo ignoto, lo que se ignora, es infinitamente ilimitado; no tiene fin, eternamente encontraremos un más allá. Empero, en lo referente a: -“Todo lo que es desconocido es infinito”-, puede señalarse que en la suma de todo, en el Todo o en un área determinada, no en su número, sino en su potencial o posibilidades, lo desconocido es infinito, pero, en términos relativos, no todo lo desconocido es infinito. Por ejemplo: si a todas las galaxias existentes, aunque su número sea desconocido para nosotros, les agregáramos una más, dejarían de ser infinitas y así ocurrirá con todas las cosas en cuanto se refiera a su cantidad, cualidades y características. Pero, en cuanto al potencial y variantes de sus manifestaciones y aplicaciones, en todos los ámbitos, conservará su carácter infinito e ilimitado. Sin embargo, encontrándose el Universo en constante expansión, lo que aún siendo limitado, en un momento dado, se encuentra en constante crecimiento, lo cual ratifica que todo potencial es de carácter infinito.

III. (3) Podría decirse que Dios sea el Infinito?
-“Sería una definición incompleta por la limitación del lenguaje humano, insuficiente para expresar las cosas que son superiores a vuestra inteligencia”-.

Dios es infinito en sus perfecciones; empero, el infinito es una abstracción. Decir, por lo tanto, que Dios sea el infinito, sería tomar el atributo por el sujeto, y definir una cosa ignota por medio de otra igualmente desconocida.

IV. (4) En qué puede tenerse la prueba de la existencia de Dios?

-“En un axioma que aplicáis a vuestras ciencias: No existe efecto sin causa. Buscad la causa de todo lo que no sea obra del ser humano y vuestra razón os responderá”-.

Para creer en Dios, es suficiente observar las obras de la Creación. El universo existe; por lo cual tiene una causa. Dudar de la existencia de Dios, sería como negar que cada efecto tenga una causa, y afirmar que la nada haya podido producir alguna cosa.

V. (6) El sentimiento íntimo que tenemos en nosotros mismos de la existencia de Dios, -no podría ser una consecuencia de la educación, y el producto de ideas adquiridas?

-“Si esto fuese así, -cómo tuvieron este sentimiento, también, las gentes primitivas?
Si el sentimiento de la existencia de un Ser Supremo fuese el producto de la instrucción, no sería universal, y no se encontraría, como las nociones de las ciencias, mas que en los individuos y en los pueblos cultos.

VI. (8) Qué se debe pensar de la opinión que atribuye la primera formación de lo creado a una combinación fortuita de la materia, es decir, de la casualidad?

-“Otra absurdidad! Cuál ser humano de buen sentido puede considerar la casualidad como un ser inteligente? Y, después, la casualidad, qué es? Nada”-.

La armonía, que regula las fuerzas del universo, demuestra combinaciones y principios determinados, y por lo tanto una potencia inteligente. Atribuir la primera formación a la casualidad, sería un absurdo, por cuanto en ella está ausente la visión y no puede producir los efectos inteligentes. Una casualidad inteligente dejaría de ser una casualidad.

VII. (10) Puede el ser humano comprender la naturaleza íntima de Dios?

-“No: necesitaría un sentido que le falta, desarrollar, aún”-.

VIII. (14) Dios es un ser distinto, o es, según la opinión de algunos, el conjunto de todas las fuerzas y de todas las inteligencias reunidas del universo.

-“Si así fuese, no existiría Dios, por cuanto Él sería el efecto y no la causa. Él no puede ser al mismo tiempo una cosa y la otra. De la existencia de Dios no podéis dudar; y esto es lo esencial. Hacedme caso y no vayáis más allá. No os perdáis en un laberinto, del cual no podríais encontrar la salida, lo cual no os haría mejores, quizá os rendiría un poco más orgullosos, por cuanto creeríais de saber, mientras que, en realidad, no sabríais nada. Poned aparte todos vuestros sistemas. Vosotros tenéis muchas cosas que os tocan más de cerca, comenzando por vosotros mismos; estudiad vuestras imperfecciones con el fin de liberaros, y esto resultará más proficuo que el querer penetrar lo impenetrable.

IX. (25) El Espíritu es independiente de la materia, o es en cambio una propiedad de esa, como los colores son una propiedad de la luz, y el sonido una propiedad del aire?

-“El uno es distinto de la otra; empero, es necesaria la unión de ambos para dar una inteligencia a la materia”-.

Es, quizá, igualmente necesaria esta unión también para la manifestación del Espíritu?

-“Es necesaria para vosotros, ya que no estáis organizados para percibir el Espíritu libre de la materia: las limitaciones de vuestros sentidos no lo permite”-.

X. (48) Podemos conocer la época de la aparición del ser humano y la de los demás seres vivientes sobre la tierra?

-“No; todos vuestros cálculos son quimeras”-.

XI. (54) Si la especie humana no procede de un solo origen, -deben los seres humanos continuar a considerarse como hermanos?

-“Todos los seres humanos son hermanos en Dios, por cuanto están animados por el Espíritu y tienden al mismo fin. Vosotros queréis tomar, siempre, las palabras literalmente”-.

XII. (58) Los mundos más lejanos del sol, -están, quizás, privados de luz y de calor, por cuanto el gran astro no tiene para ellos sino la apariencia de una estrella?

-“Creéis, vosotros, que no existen otras fuentes de luz y de calor fuera del sol? No contáis para nada la electricidad que en ciertos mundos tiene una función miles de veces más importante que sobre la tierra? Del resto, -quién os dice que todos los seres sean de vuestra misma forma y con órganos conformados como los vuestros?”-.

Las condiciones de existencia de los seres que habitan los variados mundos, deben ser apropiados al medio, en el cual son llamados a vivir. Si no hubiésemos jamás visto peces, no podríamos comprender que existan seres capaces de vivir en el agua. Lo mismo ocurre en los otros mundos, los cuales sin duda tienen elementos que nos son ignotos. -No vemos, nosotros, sobre la tierra las largas noches de los polos iluminadas por la electricidad de las auroras polares? Cuál es la imposibilidad de que, en algunos mundos, la electricidad sea más abundante que en la tierra, y tenga una acción general cuyos efectos aún nos sean incomprensibles? En consecuencia, aquellos mundos pueden llevar en sí mismos las fuentes de calor y de luz necesarias a sus habitantes.

XIII. (62) Cuál es la causa eficiente de la animalización de la materia?

-“Su unión con el principio vital”-.

XIV. (74) Se puede establecer un límite entre el instinto y la inteligencia, es decir, precisar donde termina el uno y comienza la otra?

-“No, por cuanto, frecuentemente se confunden; pero, en cambio, se pueden distinguir los actos que pertenecen al instinto de aquellos que pertenecen a la inteligencia”-.

XV. (81) Los Espíritus se forman espontáneamente, o proceden los unos de los otros?

-“Dios los crea, como todas las criaturas, con su voluntad; pero, repito, su origen es un misterio”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: Cómo emanan los seres, del Ser Universal?


En primer lugar, el Ser Universal estaría formado por dos partes esenciales:

a) El Espíritu Universal, único, ENERGÍA comparable, si pudiésemos verle con la visión espiritual, a un FUEGO CÓSMICO en constante movimiento, o, a una luz como un fuego dorado, color equivalente al de la miel de abeja pura.

b) El Alma Universal: Podríamos definirle como el vehículo o cuerpo universal, del cual emana cada Espíritu a la conciencia individual, en los cuatro reinos naturales, de la siguiente manera:

• Cada vez que el Ser Universal desea otorgar vida individual a un nuevo ser, en los cuatro reinos naturales, el Espíritu del Ser Universal se une a esa alma individual que se encuentra inserta en el Alma Universal, -equivalente a una célula creadora- adquiriendo, a partir de ese momento, vida individual, eterna e inmortal, con todos los atributos divinos del Ser Universal, por cuanto es el mismo Creador Universal encarnado en esa alma individual e individualizado, sin separarse de la Totalidad del Ser Universal, siendo UNO con Él, indisoluble, Él –mismo- diferenciado en una UNIDAD del Alma Universal. Es el equivalente a la ENCARNACIÓN DIVINA, en todo el sentido de la palabra. Y cada Espíritu constituye una encarnación de la Divinidad en un alma individual que será su vehículo eterno individualizado y diferenciado, con libre albedrío y autonomía, sujeto a los parámetros de las leyes divinas, valores universales o atributos divinos.

• Es un proceso de ENCARNACIÓN DIVINA continúo y eterno, en forma gradual, de acuerdo a las necesidades de la Creación y la expansión universal.

• Esa alma individual en la cual se ha encarnado el Espíritu Universal, individualizándose, es como una célula creadora en el cuerpo humano, comparable a un espermatozoide etérico o espiritual, después de cuya unión de Dios con esa célula, emana a la conciencia individual el NUEVO SER individualizado.

• El lugar del cual emana a la vida individualizada, esa alma individual, por la encarnación de la Divinidad como Espíritu personalizado, constituirá el espacio cósmico de cada ser en el Ser Universal, con el cual estará indefectiblemente unido con un hilo fluídico elástico, análogo al hilo de plata, fluídico y elástico, que constituye el alma,-peri-Espíritu-, que une el Espíritu con el Cuerpo.

• Gran número de doctrinas y personajes lúcidos de diferentes épocas han expresado, en algún grado, y en diversas formas, esta verdad, sin entrar en detalles, lo que, en síntesis, se refleja en lo antes expuesto; empero, la reseña que antecede permite formarse una idea clara de cómo se lleva a cabo el proceso con exactitud.

• Quedaría una pregunta digna de meditación: El proceso de emanación a la conciencia individual, de acuerdo a la reseña que antecede, se realiza paralelamente y en forma diferencial, en cada uno de los seres de los cuatro reinos naturales, o en un solo ser individualizado a partir del cual va evolucionando, a nivel espiritual, -no físicamente- pasando de una especie a otra, de un reino a otro, por etapas, hasta ocupar el nivel humano?

• Nuestra percepción personal indica un solo e idéntico proceso de la encarnación de la Divinidad en un ser individual diferenciado.
• Cada reino natural posee Espíritu, alma y cuerpo, en un proceso idéntico.

• Aquí caben dos preguntas: 1) En los mundos muy avanzados, existen minerales, plantas y animales? 2) Sus Espíritus son los mismos que formaron parte de aquellos mundos primitivos e intermedios por los cuales pasaron las humanidades muy evolucionadas?

• Si estas preguntas tienen respuestas afirmativas, es decir, que: los Espíritus de los minerales, de los vegetales y de los animales que conforman los mundos muy evolucionados y que acompañan a las humanidades que los pueblan, han evolucionado paralelamente, y les han acompañados en el proceso evolutivo, hasta esta etapa superior, conservando su respectivo rango de mineral, vegetal o animal, entonces, la respuesta correcta a la pregunta formulada sobre el proceso de la encarnación de la Divinidad a nivel del alma individualizada, sería la de que, la Divinidad, siendo la misma, se encarna en cada reino natural individualizando el Espíritu respectivo y diferenciado de cada especie.

• Si el Espíritu humano debiese pasar por los procesos de transformación evolutiva, a nivel espiritual, por todas las variantes minerales, vegetales y animales, sería un proceso demasiado largo. Por lo menos, a nivel del planeta tierra, y de los mundos superiores en progreso al de nuestro planeta, el ser humano, desde su primera existencia, en la tierra, siempre ha sido humano. Esto se deduce claramente de la respuesta que obtiene, Allan Kardec, a la pregunta Nº 172 de El Libro de los Espíritus. Este tema, apasionante de por sí, amerita mayores análisis y meditaciones para dejarlo zanjado.

XVI. (85) Cuál de los dos mundos, el espiritual o el corpóreo, es el principal en el orden de las cosas?

-“El mundo espiritual; porque ha preexistido, y sobrevive a todo”-.

XVII. (92) Los Espíritus tienen el don de la ubicuidad? En otros términos: -puede el mismo Espíritu dividirse y estar en varios lugares a un mismo tiempo?

–“No; pero, cada Espíritu es un centro, que irradia en varias partes, por lo cual pareciera que se encuentre en varios lugares al mismo tiempo. Ved, el sol es uno, pero irradia todo alrededor y envía sus rayos muy lejos, sin dividirse en varias partes”-.

Irradian todos los Espíritus con la misma potencia?

-“Es evidente que no, por cuanto ésta depende del grado de su respectiva pureza”-.

Cada Espíritu es una unidad indivisible; pero puede extender su pensamiento en más direcciones al mismo tiempo. En esto solo consiste la facultad de la ubicuidad atribuida a ls Espíritus. De esta manera es un cuerpo luminoso que envía lejos sus rayos y puede ser visto desde todos los puntos del horizonte; así un ser humano. Que, sin cambiar de sitio y sin dividirse, puede transmitir órdenes, señales y movimientos en diversos lugares.

XVIII. (110) CLASE TERCERA: Espíritus prudentes. – Elevadísimas cualidades morales forman el carácter distintivo de estos Espíritus. Sin tener conocimientos del todo ilimitados, se encuentran dotados de una capacidad intelectual que le permite formarse un sano juicio sobre los seres y las cosas.

XIX. (114) Los Espíritus son por su naturaleza buenos o malos, o, en cambio, se van mejorando por su propia voluntad?

-“Son los mismos Espíritus que se mejoran por sí mismos, y, mejorándose, pasan de un orden al otro”-.

XX. (383) Cuál utilidad aporta al Espíritu su paso por el estadio de la infancia?

-“Por cuanto se encarna con el objetivo de perfeccionarse, en aquella edad el Espíritu es perceptible a las impresiones que recibe y que pueden estimular su progreso, y a este progreso deben contribuir quienes están encargados de su educación”-.

XXI. (403) Por qué no recordamos todos los sueños?

-“Lo que vosotros llamáis sueño es el reposo del cuerpo, por cuanto el Espíritu es siempre activo. En tal estado, él recupera su libertad, y se interrelaciona con sus seres queridos, sean éstos de la dimensión física o de la espiritual; empero, por cuanto el cuerpo es materia pesada o densa, le cuesta mantener las impresiones percibidas por el Espíritu por vías extra-sensoriales”-.

XXII. (404) Qué valor tiene la interpretación de los sueños?

-“Ninguna, como la entienden los pretendidos adivinos, por cuanto es absurdo creer que la realización de un acontecimiento pueda depender de un sueño, o bien, es absurdo creer que el soñar una determinada cosa anuncie su realización. Los sueños son verdaderos en cuanto representan imágenes reales para el Espíritu; pero, éstas, normalmente, no tienen ninguna relación con las vivencias de la vida corpórea, y son, como lo hemos dicho, reminiscencia de un pasado más o menos próximo. Sólo algunas veces, por vía excepcional, pueden ser un presagio del futuro, o la visión de lo que acontece en otro lugar, donde el Espíritu se proyecta”-.

XXIII. (405) Frecuentemente vemos en sueño cosas que parecen presentimientos, pero después no suceden. -Cómo explicarlo?

-“Ellas pueden verificarse para el Espíritu, si bien no para el cuerpo; por cuanto aquel va a encontrar las cosas y las personas en su nivel. Del resto, es preciso recordar que, durante el sueño, el Espíritu está siempre más o menos ligado a la materia, por lo cual no se libera jamás completamente de las ideas terrenas, por lo cual las preocupaciones de la vigilia puede dar a lo que se ve lo que se desea o teme. Esto, pero, no es más que un efecto de la imaginación, por cuanto, cuando la persona e vivamente preocupada por una idea, ella refiere a ella todo lo que ve”-.

XXIV. (421) Los letárgicos y los catalépticos generalmente ven y oyen todo cuanto acontece a su alrededor, pero no lo pueden manifestar: -lo hacen con los ojos y con los oídos del cuerpo?

-“No: con el Espíritu. Éste tiene conciencia de sí; pero no puede comunicarse”-.

-Por qué no puede comunicarse?

-“Porque el cuerpo se le opone. Tal estado particular de los órganos os da la prueba que en el ser humano existe, además del cuerpo, otra fuerza, la cual actúa mientras el cuerpo se encuentra inerte”-.

XXV. (435) -Puede el Espíritu ver los demás Espíritus?

Puede, pero depende del grado y de la naturaleza de su lucidez. Alguna vez él no se da cuenta con quien ha de tratar, y los toma por seres corpóreos. Esto sucede especialmente a quienes no conocen el Espiritismo, por cuanto no comprendiendo la esencia de los Espíritus, se asombran* y los creen corporalmente vivos”-.

De igual manera acontece después de la desencarnación en aquellos que se creen todavía encarnados: no se dan cuenta de algún cambio en torno a sí, creen los Espíritus vestidos de cuerpos similares a los nuestros y confunden la percepción del propio cuerpo por un cuerpo real.

XXVI. (491) -Cuál es la misión del Espíritu protector?

-“La de un Padre hacia sus propios hijos: guiar su protegido en la buena vía y ayudarle con consejos; consolarlos en las aflicciones, y alentar su coraje en las pruebas de la vida”.

XXVII. (508) Los Espíritus virtuosos que han dejado la dimensión física, -pueden, siempre, proteger a sus seres queridos, que, aún, permanecen en ella?

-“Su poder es más o menos limitado, y no siempre la condición en la cual se encuentran le dejan en plena libertad de actuar”-.

XXVIII. (517) Existen Espíritus que se dedican a proteger a toda una familia?

-“Existen Espíritus que protegen a los miembros de una misma familia, para que vivan juntos unidos por el afecto; empero, no los hay protectores del orgullo de los grupos étnicos”-.

XXIX. (527) Tomemos otro ejemplo: una persona que debe desencarnar fulminada, se refugia debajo de un árbol; el rayo le envía a mejor vida. -Han tenido alguna participación los Espíritus tanto en provocar el rayo como en orientarlo en dirección de la persona en particular?

-“Nos encontramos en un caso similar al anterior. El rayo se manifestó sobre aquel árbol y en aquel momento, por cuanto las leyes de la naturaleza así lo determinaron, y no porque aquella persona se encontraba debajo del árbol. Empero, la persona fue inspirada a proceder de aquel modo y refugiarse debajo del árbol sobre el cual debía caer el rayo. El árbol, de todas maneras, habría estado afectado tanto si la persona se refugiaba como si hubiese dejado de hacerlo, debajo de él”-.

XXX. (535) De las propias condiciones venturosas de vida, -es a nuestro Espíritu protector a quién debemos expresar gratitud?

-“Agradeced, primeramente, al Creador Universal, sin cuya voluntad, -por la Ley Cósmica-, no ocurre nada; después a los buenos Espíritus, quienes han sido los instrumentos”-.

-Qué ocurriría si dejáramos de expresarles nuestra gratitud?

-“Lo que les ocurre a los ingratos”-.

Sin embargo, -existen algunos que aún sin orar ni expresar gratitud, son exitosos en todo?

-“Sí, pero hay que esperar hasta el final; toda fortuna obtenida sin méritos, suele tener un costo inherente; cuanto más se haya recibido, tanto más hay que pagar”-.

XXXI. (538) Los Espíritus que presiden los fenómenos de la naturaleza, forman una clase especial? Constituyen una categoría particular de seres, o son Espíritus que estuvieron encarnados como nosotros?

-“Que fueron y que serán”-.

Pertenecen a los órdenes superiores o a los inferiores de la jerarquía espirita?

-“Según que su oficio sea más o menos inteligente. Los unos dirigen, los otros ejecutan; quien ejecuta las cosas materiales es siempre de orden inferior; así ocurre entre los Espíritus como entre los seres humanos”-.

XXXII. (548) Un Espíritu que asistiese a una batalla como simple espectador, -puede percibir la separación del Espíritu del cuerpo, en los caídos? Y, -cómo se le desenvolvería, bajo su mirada, este fenómeno?
-“Pocas desencarnaciones ocurren en forma instantánea. En la mayoría de los casos, el Espíritu, cuyo cuerpo ha sido afectado mortalmente, aún no ha adquirido conciencia de ello. Tan pronto lo perciba, se acerca al cuerpo, que permanece inerte, siendo la vida toda del Espíritu, es sólo a él mismo que se habla, y se dirige”-.

XXXIII. (664) Es de alguna utilidad orar por los Espíritus que han desencarnado y por aquellos que se presume que sufren? Si la respuesta es afirmativa, -cómo pueden nuestras oraciones ayudarles y abreviarles sus estados de afectación espiritual?

-“La oración no puede tener el efecto de cambiar los designios de Dios; pero, el Espíritu, por quien uno ora, recibe el estímulo de la demostración de afecto que se le da, por cuanto el ser que debe transmutar su estado de conciencia, es siempre grato de recibir el apoyo de quienes buscan su bien. Por otra parte, con la oración, el Espíritu es estimulado al arrepentimiento y al deseo de hacer lo que sea preciso para ser felices. En este sentido, pueden ser abreviadas las consecuencias, si de su parte hay el apoyo de su buena voluntad. El deseo de mejorarse, estimulado por la oración, llama a su lado Espíritus mejores, que van a iluminarle, a consolarle, y a darle esperanza. Jesús oraba por las ovejas descarriadas, mostrándoos, de esta manera, que seríais responsables, si vosotros no orarais por quienes lo requieran”-.

XXXIV. (694) Cómo juzgar las prácticas que impiden la reproducción para satisfacer la sensualidad?

-“Demuestran el predominio del cuerpo sobre el Espíritu y cuanto el ser humano se encuentra subordinado a la materia”-.

XXXV. (697) La indisolubilidad absoluta del matrimonio se encuentra en la ley natural o, únicamente, en la ley humana?


-“Es una ley humana contraria, en elevado grado, a la natural; pero, los seres humanos pueden cambiar sus propias leyes: solamente las de la naturaleza son inmutables”-.

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EL ENCUENTRO EN LA VICTORIA



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UN ENCUENTRO EN LA VICTORIA

Autor: ©Giuseppe Isgró C.

Del libro: La Victoria

Capítulo I

Me encontraba un día, en una fuente de aguas tranquilas, cristalinas, cuando se me acercó un Venerable hombre, vestido a la antigua usanza, con bata blanca, larga, pelo y barba que alguna vez fueron de color pelirrojo y un báculo en la mano derecha.

Concentró sus ojos en los míos; su mirada era profunda, serena y apacible.

Con voz suave y afectiva, me dijo:

-“Hola, hijo, como estás”-.

–Bien, -le contesté-; y, ¿usted?

–Por aquí andamos; -fue su respuesta-, mientras me sonreía.

-¿Dónde estamos?, -le pregunté al Venerable hombre-.

-Este sitio es conocido como La Victoria; -me contestó-. –¿Qué haces por estos lados?

-Salí esta mañana, temprano, con el coche, a dar un paseo; luego, al llegar a esta zona, me paré a contemplar la belleza de los araguaneyes y decidí caminar un poco y la verdad que, absorto en mis reflexiones, caminé por lo menos durante dos horas, hasta llegar aquí. Desconocía este hermoso lugar. Y, usted, -¿vive por aquí cerca? -le pregunté-.

Un poco más arriba, en esa colina boscosa. Hace algunos años, -relata el Venerable hombre- decidí retirarme de la agitada vida ejecutiva en que me desenvolvía profesionalmente, como abogado, en la ciudad de Quebec, Canadá, aunque he viajado por diversos países asesorando a incontables líderes. Construí la casa, en esta zona tropical, con la idea de pasar aquí los meses de invierno. Me dedico al estudio de la vida, a la meditación y a cultivar mi jardín y de vez en cuando, a escribir mis reflexiones, las cuales, algún día, habrán de ser publicadas para esparcir un poco la luz que he podido vislumbrar en mis estudios metafísicos-espirituales.

-¿Quieres tomar un café? –Me preguntó el Venerable hombre-. Lo he traído de Caripe El Guácharo; es de los más exquisitos que he probado.

-Sí, con gusto se lo acepto; -le contesté-.

Nos fuimos caminando por un sendero rodeado de árboles cargados de mangos, aguacates, naranjas y una hilera de cayenas de diversos colores. A lo lejos, el ruido de la brisa se oía apaciblemente. Todo era quietud, armonía y paz. Pero, sobre todo, lo que más me impresionaba era la apacibilidad y el sosiego del Venerable hombre de La Victoria. Emanaba de él un flujo de fuerza que, en su presencia, me sentía con un poder y una seguridad nunca antes experimentados. Fuerzas bienhechoras se iban apoderando de mí y aquella paz y relax que buscaba en la mañana, al salir a dar un paseo, sin percatarme de ello, las estaba experimentando ya.

Después de unos quince minutos de caminar, llegamos a la casa del Venerable hombre. Su aspecto exterior humilde estaba lejos de dejar entrever lo que segundos después habría de asombrarme con lo que encontré en el interior.

Al entrar, en la casa, una joven de unos veinte años saludó al Venerable hombre.

-¡Hola, abuelo!, ¿cómo estás?

–Bien, hija, -contestó el Venerable hombre-. -Prepara un poco de café, Lucía, mientras conversamos un poco, adentro.

-Por cierto, te presento a Santiago, quien ha llegado paseando hasta La Victoria.

Después de la presentación, entramos en la biblioteca del Venerable hombre. Un salón grande, lleno de estantes de libros por todas partes, lo cual hacía inimaginable dicho cuadro desde el exterior. Algunos cuadros al óleo de morichales y de personajes históricos, presentaban un ambiente acogedor. En un rincón se encontraban diversos retratos de Tagore, Gandhi, Cicerón, Séneca, Ibn Arabi y un dibujo de Don Quijote y Sancho Panza. En un pequeño cuadro, podía leerse: -“Lo que Alá quiera. Nada se le asemeja”-.

-Le felicito por este inmenso tesoro que usted tiene aquí, -le dije al Venerable hombre-. -¿Cuáles son los temas de su interés?

A lo cual, me contestó: -Como usted puede ver, Santiago, -y me invitó a recorrer los estantes- aquí hay libros de variados temas: clásicos de todos los países y épocas, desde los Vedas, los Upanishads, el Mahabaratha, los libros de Confucio, El Tao te King, de Lao Tse, el Poema de Gilgamesh, el Código de Amurabí, autores griegos, como Homero y Hesiodo. Se encuentran las obras completas de Euclides, Platón, Aristóteles, Teofrasto, Demetrio de Falereo, de los Presocráticos, Epicteto, Plutarco, etcétera; de los latinos, autores como Séneca, Cicerón, -que son mis preferidos-, Julio César, Tito Livio, Dionisio de Halicarnaso, Marco Aurelio, así como libros de Psicología, Gerencia, Sufismo, Yoga, ensayos, filosofía, parapsicología, hermetismo, El Quijote, libros de economía, filosofía, etcétera, en fin, un poco de todo lo que es preciso conocer para poder entender el significado de la vida: de dónde venimos, por qué estamos aquí y hacía dónde vamos, sin lo cual, la vida no tendría sentido, sobre todo por el gran afán a que está sometido el ser humano en la agitada vida moderna.

Nos sentamos en sendas butacas y nos entretuvimos conversando de temas diversos. Al poco rato, entró Lucía con dos tazas de oloroso café y unos biscochos, que degustamos con agrado en una amena e interesante conversación. Al fondo, podía oírse una suave música de Beethoven.

Pasamos cerca de una hora conversando de sobre la Atlántida, Egipto, los griegos, de Homero, de los sufíes, del budismo zen, los poderes del espíritu, meditación, etcétera, después de lo cual, le hice una pregunta directa.

-Seguramente, usted ha desarrollado alguna técnica de meditación y algún método de resolución de situaciones, en la vida, que me quisiera explicar, ya que, según observo, para tener usted una serenidad tan acentuada y una fortaleza física a la edad que imagino que usted debe tener, -cerca de noventa años- es porque ha encontrado en su larga experiencia algún secreto que quizás quisiera compartir conmigo.

Santiago, -me dijo el Venerable hombre, si vuelves a visitarme otro día, quizá te cuente algo que te pueda servir. Empero, antes de que te vayas, te haré entrega de unos apuntes que hace ya muchos años, en una época en que yo andaba a la búsqueda de sosiego y tratando de encontrarle sentido a la vida, un Venerable hombre que, en una edad similar a la mía, a su vez me entregara y cuya práctica asidua me permitió domar la mente, encarrilar mi vida y poner bajo control los hilos del destino. Son veintidós manuscritos, y una meditación diaria, –continuó diciendo el Venerable hombre, que si bien son ya un poco antiguos, podrás copiarlos de nuevo y si pones en práctica las técnicas que contienen, darás a tu vida un esplendor que habrá de sorprenderte agradablemente.

-Una vez que los hayas probado con total y absoluta satisfacción de tu parte, -me dijo, ponlos en limpio, en forma de libro y publícalo para que su mensaje llegue a mayor número de personas. Hacía tiempo que esperaba a alguien a quien confiarle este legado y creo que hoy, al llegar aquí, en la forma en que lo has hecho, tus pasos han sido dirigidos por Aquel que todo lo sabe y puede, por la Ley Cósmica, y en cuyos planes universales, todos somos sus instrumentos.

Me despedí del Venerable hombre y de su adorable nieta, sintiendo dentro de mí fuerzas desconocidas hasta entonces que preanunciaban grandes cambios en mi vida.

En los días siguientes, aparté una hora diaria, antes de dormirme, y leí y releí, todos los manuscritos, de la siguiente manera: En primer lugar copié la Meditación diaria en un cuaderno, el cual leí durante veintidós noches y mañanas seguidas, tal como lo indicaban las instrucciones de la misma.

Una nota al pie de página mencionaba que si yo la transcribía en un cuaderno, el hecho de hacerlo, grabaría en mi ordenador mental las instrucciones y me sería más fácil desarrollar, en mi personalidad, las cualidades y condiciones que formaban parte de los objetivos implícitos en la misma.

De los veintidós manuscritos, cada lunes, a las once en punto de la noche, copiaba uno en el cuaderno, y durante el resto de la semana, a la misma hora, lo leía y meditaba, siguiendo las fáciles y efectivas técnicas e indicaciones al inicio del mismo.

Cuatro semanas después de leer durante veintidós días seguidos, en la noche y en la mañana, la meditación diaria, comenzaron a manifestarse en mi vida una serie de cambios positivos que me dejaban asombrado a mi mismo, pero, también, los miembros de mi familia y a mis amistades; sobre todo mi semblante comenzó a ser más apacible; volví a sonreír desde el interior; mi estado anímico era de contento; me sentía más seguro de mi mismo; comencé a confiar más en la gente, en la vida y a vislumbrar el sentido de mi misión en la vida –percibía cosas que antes me pasaban desapercibidas, a pesar de haber estado siempre allí. Sentía fluir en mí una nueva corriente vivificadora de prosperidad, de felicidad, de alegría de vivir. Mi entusiasmo y amor por la vida y por mi familia, por mi trabajo y por las personas, crecía día a día. En aproximadamente dos meses había logrado muchas de las cosas en las cuales había soñado desde hacía años. Había dado un paso sorprendente en el camino de la autorrealización.

Efectivamente, pude comprobar que me fue relativamente muy fácil desarrollar las aptitudes y actitudes a nivel físico, mental, emocional, espiritual y en diversos aspectos de mi vida, como el financiero, que comenzó a mejorar casi inmediatamente, así como, surgieron nuevas oportunidades que comencé a aprovechar, casi sin esfuerzo de mi parte.

Transcurría el año de 1967 y mi vida había encontrado un sendero que habría de conducirme a cooperar en forma más efectiva en el plan divino que el Supremo Hacedor, en algún momento, había diseñado para mí.

Tres meses después volví a aquel lugar donde había encontrado al Venerable hombre de La Victoria y allí estaba la fuente que él dijo llamarse La Victoria; empero, cuando traté de encontrar el camino para llegar a la casa donde amablemente me ofreció un delicioso café, preparado por su nieta Lucía, no logré encontrarlo, pese a haber recorrido durante un par de horas por los alrededores. Pregunté a varias personas para ver si podían indicarme como llegar a la casa del Venerable hombre y cual fue mi sorpresa, nadie lo conocía.

Empero, después de tanto buscar, volví a encontrar la casa donde vivía el Venerable hombre de La Victoria, pero se encontraba abandonada. Su aspecto indicaba que debía encontrarse en ese estado un lapso mayor del que mediaba con el encuentro de aquel ser extraordinario. Es sorprendente como los inmuebles solos acusan el paso del tiempo en mayor grado que los que son habitados. Si no fuera por los manuscritos pensaría que el encuentro no fue más que un simple sueño. -¿O se trata, acaso de un sueño combinado con un fenómeno de aporte? Personalmente, no lo creo. El encuentro fue muy vívido y real. El aromático café servido por Lucía estaba exquisito. Durante varios años volví al lugar varias veces, la casa seguía sola. La última vez que volví, no la pude ubicar y sin tener tiempo suficiente para seguir buscándola, me fui. Ahora, vivo muy lejos de aquella zona, en otro continente; han transcurrido muchos años y después de tanto tiempo es poco probable que vuelva allí; pero, los manuscritos y la meditación diaria obran en mi poder, me han transformado y han enriquecido mi vida.

Durante más de treinta y cinco años he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen los manuscritos y la meditación diaria y cada vez que los pongo en práctica, experimentos los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para mí.

Su contenido es eminentemente práctico; no hay teorías superfluas. Si lleva a cabo los ejercicios que contienen, es probable que, gradualmente, se vaya efectuando la transmutación alquímica de su ser sintonizándose con los elevados resultados existenciales, los cuales, por añadidura, al ser creados a nivel mental, se van manifestando en su propia vida, oportunamente.

Sobre todo, con estos ejercicios, me percaté, cuando el Venerable hombre me entregó los manuscritos, de que se dispone de un método para domar la mente y ejercer un pleno dominio sobre la vida en general y, por ende, sobre el destino y controlar, cuando eventualmente se presenten, todas las situaciones, manteniendo un perfecto equilibrio físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

El Venerable hombre de La Victoria me comentaba que todo se puede lograr en la vida si se siembra la respectiva semilla por medio de correctas decisiones acordes con la propia y elevada auto-estima y dignidad personal, desarrollando el convencimiento de que sí se puede hacer, por medio de las afirmaciones, las visualizaciones y meditaciones, la experimentación de un estado emocional acorde al momento de ser logrados los respectivos resultados y la practica del desapego, es decir, dejar encargada a la mente psiconsciente del logro, y además, se espera el tiempo necesario haciendo, mientras tanto, todo lo que se requiere, según el caso o los objetivos por alcanzar.

Estas técnicas funcionan, me decía una y otra vez el Venerable hombre de La Victoria; luego, agregaba: -las he probado por más de cincuenta años y quien, a su vez me las entregó, habría hecho otro tanto, aseverando que eran efectivas, si yo seguía fielmente las instrucciones y las ponía en práctica con expectativas positivas.

Desde que en 1967, el Venerable hombre me hiciera entrega de los manuscritos, han transcurrido un poco más de de treinta y cinco años, durante los cuales yo también he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen, y cada vez que me ejercito con ellos, experimento los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para todos los que hemos aplicado las enseñanzas del Venerable hombre de La Victoria.

Él me repetía constantemente: -“¡Tú puedes si crees que puedes hacerlo! ¡Hazlo y tendrás el poder!

Recuerdo que ese día el Venerable hombre me dijo: -ejercer el poder con que la naturaleza de las cosas ha dotado a cada ser, cultivando los dones inherentes y aprendiendo todo lo que se pueda de sí y del vasto universo del que se forma parte, es una manera efectiva de ser cada día más feliz. Luego, cuando me despedí de él, expresó: -“¡Que cada día brille más y mejor tu luz interior!”.- Adelante.

Capítulo 2

Meditación diaria

Es lunes en la noche, son las once en punto.

Me dispongo a copiar textualmente, en el cuaderno que he dispuesto para ello, el manuscrito identificado con el título:

Meditación diaria

Dice así:

Afirme, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desee, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubra cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en su vida:

MEDITACIÓN DIARIA

Afirma, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desees, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubre cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en tu vida. Al encender la luz en la mente se ilumina la propia existencia y todo en derredor vibra al unísono y con el mismo sentimiento de felicidad y bienestar, interrelacionándose por la ley de afinidad.

1. -Entro en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, contando de tres a uno: Tres, dos, uno.

Ø Ahora, estoy ya en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre.

Ø Voy a permanecer en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, durante quince minutos y voy a programar los siguientes efectos positivos, los cuales perduran, cada vez mejor, hasta que vuelva a realizar este acceso y programación mental:

Ø Todo va bien, siempre, en todos los aspectos de mi vida, cada día mejor. (Tres veces). –Imagínalo-.

Ø Todo va bien en mi trabajo; cada día logro mejores niveles de efectividad, prosperidad, riqueza, abundancia y bienestar. (Imagínalo).

2. Formo una unidad cósmica perfecta con el Creador Universal, -ELOÍ. (Diez veces, con los ojos cerrados). Hoy se expresa en mí la Perfección universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión en todos los aspectos de mi vida.

3. -Cada día, en todas formas y condiciones, mi cuerpo y mi mente funcionan mejor y mejor. La consciencia de mi conexión permanente e indisoluble con el Creador Universal, -ELOÍ-, restablece y mantiene en mí, diariamente, durante las veinticuatro horas del día, un perfecto estado de salud a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Creador Universal, por darme un cuerpo perfecto, saludable, lleno de energía. Aquí y ahora, me siento en perfecto equilibrio de salud, a nivel físico, mental, emocional y espiritual.

4. Afronto y resuelvo bien toda situación que me compete, siempre.

5. Todo tiene solución, en todas las situaciones de mi vida.

6. El Creador Universal, -ELOÍ-, es en mí, cada día mejor, en todos los aspectos de mi vida, fuente de amor, luz, sabiduría, éxito, riqueza, prosperidad, abundancia y armonía.

7. Permito que las leyes universales de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión actúen bien en el plan de mi vida.

8. Tengo prosperidad y poder. Cada día enriquezco mejor mi vida a través del servicio efectivo, del amor y de la práctica de todas las virtudes.

9. Mi dignidad personal me lleva a realizar las cosas que me competen con la máxima perfección posible.

10. Cada día, en todas formas y condiciones, en todos los aspectos de mi vida, estoy mejor y mejor a nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

11. Actúo con templanza, serenidad, autodominio y perfecto equilibrio en todo. Conservo plena autonomía y control sobre todas mis facultades físicas, mentales, emocionales, intelectuales y espirituales. Hecho está. (Visualizar un escudo protector de luz que te envuelve y protege; -una pirámide-).

12. Tengo fortaleza, valor, confianza y fe suficiente para triunfar y alcanzar todas mis metas, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y en armonía con sus planes cósmicos. Soy inmune e invulnerable a las influencias y sugestiones del medio ambiente y de cualquier persona a nivel físico, mental, emocional y espiritual, en las dimensiones objetivas y subjetivas y en cualesquiera otras en que sea requerido.

13. El orden universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión se establece en mi vida, en todos mis asuntos y en las personas interrelacionadas, aquí y ahora. Hecho está.

14. Asumo la responsabilidad de mis actos y cumplo bien todos mis compromisos, siempre oportunamente, de acuerdo con el orden cósmico.

15. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos da abundancia y armonía en el eterno presente. Vivo en abundancia y en armonía perfectas, aquí, ahora y siempre.

16. El Creador Universal, -ELOÍ-, se está ocupando de todo, en todos los aspectos de mi vida, y se expresa en mí conciencia intuitiva por medio de los sentimientos en correspondencia con los valores universales.

17. Gracias, Creador Universal, -ELOÍ-, por esta vida maravillosa. Que Tu Inteligencia Infinita, Amor, Sabiduría, Justicia, Luz, y Poder Creador guíen, adecuadamente, todas mis decisiones y acciones, ahora y siempre. Gracias, Eloí, por este día maravilloso.

18. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos proteja, aquí y en cualquier lugar, ahora y siempre. (Tres veces).

19. Siempre espero lo mejor, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y la Ley Cósmica, en armonía con todos.

20. Gracias, Creador Universal; todo va bien en todos los aspectos de mi vida, a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Eloí, todo va bien en mis practicas espirituales y en mi relación Contigo; Tú y yo formamos una unidad perfecta, armónica, aquí y ahora, en el eterno presente. Yo soy Tú, Tú eres yo. Te amo.

21. Voy a realizar –obtener o resolver- (mencionar), antes del: (fecha), de acuerdo al orden divino y en armonía con todos. (Si se trata de varios objetivos, anótelos y haga la afirmación y visualización con cada uno de ellos. Imagínelo concluido satisfactoriamente sin imponer canal alguno de manifestación.)

22. Tengo serenidad y calma imperturbable. Soy impasible frente a todo y a todos. No tengo temor a nada, a nadie ni de nadie en ningún nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero. Dentro de mí vibra la seguridad total. Tengo completa confianza en la vida y en mi propia capacidad de resolver situaciones y alcanzar los resultados satisfactorios que preciso, en cada caso, siempre.

A continuación anoté la fecha: Lunes 12 de agosto de 1967. Luego, tal como me lo indicó el Venerable hombre, anoté la fecha que correspondía veintidós días después: 03 de septiembre de 1967.

Acto seguido, me senté cómodamente, tomé tres respiraciones profundas y realicé la meditación.

Luego, cada noche, durante veintidós días, a las once en punto, me iba a mi cuarto, daba indicaciones de no ser interrumpido durante veinte minutos y realizaba la meditación del día, la cual, siempre complementaba con la lectura breve de uno de los libros de cabecera que siempre suelo tener en mi mesa de noche.

Iba notando, día a día como emergía de mi interior una nueva y desconocida fortaleza, seguridad, estado de ánimo contento, actitud más decidida, optimismo frente a la vida y a las situaciones; comencé a llevarme mejor en las relaciones con las demás personas, a ser más comedido en todo y sobre todo comenzaba a tener conciencia de cosas que antes me solían pasar desapercibidas.

Cabe destacar que, en el punto número veintiuno de la meditación, había anotado siete objetivos que desde hacía tiempo quería realizar y para mi sorpresa, treinta días después de haber terminado de efectuar la meditación del manuscrito número veintidós comencé a observar como, en forma aparentemente casual se iban manifestando la resultados de cada uno de ellos hasta que, algunos meses después, antes de la fechas previstas, los había realizado todos, menos dos, por lo cual, me senté y volví a anotar, en una hoja de mi cuaderno, otros diez objetivos, encabezados por los dos pendientes de la lista anterior, les puse la fecha tope a cada uno, antes de la cual debían ser logrados, para seguir visualizando, su logro, periódicamente.

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sábado, 15 de marzo de 2014

ANTOLOGÍA: LA SABIDURÍA DE EL LIBRO DE LOS ESPÍRITUS, DE ALLAN KARDEC


ANTOLOGÍA:
LA SABIDURÍA DE EL LIBRO DE LOS ESPÍRITUS,
DE ALLAN KARDEC

-Versión castellana y comentarios exegéticos de Giuseppe Isgró C.-


I. (1) Quién es Dios?

-“Dios es la suprema inteligencia, la causa primera de todas las cosas”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: En la primera edición de El Libro de los Espíritus la pregunta se formula tal como la hemos traducido desde la edición italiana, es decir: Quién es Dios?, en vez de: Qué es Dios, como se modificó en la segunda edición francesa y en todas las versiones a partir de entonces. Cuál de las dos formas es más acertada? Estimamos que ambos enfoques de preguntas son correctos, empero, la respuesta: -“Dios es la suprema inteligencia, la causa primera de todas las cosas”-, correspondería mejor a lo que es Dios. Ahora bien: “la suprema inteligencia” es un atributo que alguien posee; quién es ese alguien? Ese alguien es Dios. Entonces la respuesta a la pregunta: Quién es Dios?, debería ser: Dios, es el Ser Universal que posee la suprema inteligencia, y constituye, al mismo tiempo, la causa primera de todas las cosas-.
Como suprema inteligencia ha contemplado todas las variantes habidas y por haber en el eterno presente, sin límites de ninguna naturaleza.

Como causa primera de todas las cosas, constituye la fuente de donde emanan a la Conciencia, en un momento dado, todos los Espíritus de todos los seres en los tres reinos de la naturaleza, con individualidad claramente demarcada y con unos atributos que se corresponden, en forma análoga, a los atributos divinos poseídos por el mismo Ser Universal. En este caso tendríamos Seres individuales y un Ser Universal, formando una Unidad perfecta e indisoluble. Fueron creados esos seres individuales o siempre han estado en la fuente, y en un dado momento han emergido a la conciencia? Esto derivado de que la vida no se crea ni se destruye, simplemente existe. Emana a la Conciencia, en cada uno de los cuatro reinos naturales con una misión específica y en calidad de ejecutores de la Voluntad del Ser Universal; Él constituye el anhelo de ser, mientras que los seres individuales, -en los cuatro reinos- constituyen los ejecutores de dicha voluntad en todos los planos existenciales, en el eterno ahora.

La Conciencia de un Espíritu como ser individual, en los cuatro reinos naturales, nos aportaría la explicación de la creación de las formas materiales de la vida en todos los planos de expresión, así como de la creación de los mundos, su desarrollo y extinción, en incontables ciclos, los cuales, gradualmente, iremos analizando, buscando la percepción intuitiva más que percepción objetiva o razonamiento intelectual, lógicamente limitado. Es preciso centrar la atención en este enfoque para ir expandiendo la conciencia al respecto y la gradual percepción o darse cuenta de la realidad, siempre en expansión ilimitada.

La Unicidad de Dios: Hay un solo Ser Universal, o Creador. Pese a su emanación a la conciencia individual desde el Ser Universal, los seres individuales siguen conformando la Unidad con el Ser Universal, cuya emanación individualizada les faculta con el libre albedrío, les dota de los mismos atributos del Ser Universal, los cuales se corresponden con los valores universales. Además, cada ser individual esta dotado de una conciencia que constituye una réplica idéntica a la del Creador, por medio de la cual los seres individuales y el Ser Universal se comunican entre sí.

Cuáles son esos atributos divinos que los seres poseen en forma análoga a los del Ser Universal, en los cuatro reinos de la naturaleza, es decir: el humano, el animal, el vegetal y el mineral?

Cuáles son los nombres divinos del Ser Universal, que analizándolos o meditando sobre ellos, constantemente, permitan percibirle y conocerle?

Evidentemente, conociendo los atributos divinos en su totalidad o en parte, gradualmente, cada quien puede adquirir conciencia de ÉL, de acuerdo al propio nivel evolutivo.

II. (2) Qué debe entenderse por infinito?

-“Lo que no tiene ni principio, ni fin; lo ignoto. Todo lo que es desconocido es infinito”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: En el sufismo, se le asignan las siguientes dos características a Dios, -el Ser Universal: La primera, denominada "Qidám", es decir: -“Él es lo anterior a lo anterior. Él no se hizo. Él siempre fue“-. La segunda, con el término "Baqá'", que significa: -“Él es el después del después, Eterno; Él siempre será“-.

Dios, -el Ser Universal-, constituye uno de los mejores ejemplos de la características del término “infinito”, por su carácter atemporal y eterno, como lo expresa el “Quidam”: -”Él no se hizo”; simplemente era, es y será en el eterno presente.

La primera vertiente del término “infinito” se relaciona con el tiempo: por su condición de eterno presente el tiempo es eterno, por lo cual, constituye el segundo mejor ejemplo de “infinito”.

En la segunda, Dios es, también, infinito en la perfección y en el potencial de sus atributos. En el potencial, por cuanto, si bien Su perfección lo es en grado infinito, en lo relativo a Su capacidad creadora, desde el momento en que siguen emanando de Él nuevos seres a la conciencia individual, en los cuatro reinos naturales, la misma se encuentra, aún, en grado de potencialidad, infinita, sí, pero potencial, es decir, seguirá en Su rol Creador eternamente. Esta característica de potencialidad de su capacidad creadora dejaría de ser potencial si ya todos los seres que existirán, en el eterno presente, existieran ya, es decir, que no van a emanar más nuevos seres a la conciencia individual, a partir del Ser Universal. En este caso, todos los seres, en los cuatro reinos naturales, existirían desde siempre, junto al Creador Universal. Pero, su capacidad creadora de nuevas expresiones de vida tiene un potencial infinito aún en el caso de que, el Espíritu individualizado en el Alma Universal, y dentro de una unidad de ella, sea, como de hecho es, el Espíritu Universal del Creador. Con este enfoque, realmente, no habría creación de nuevos seres, ya que quien se encarna en “la unidad” del Alma Universal, en una expresión individualizada, -SER INDIVIDUAL- es el mismo Creador Universal, -sin dejar de ser Él, ni separarse de Él-, a partir de cuyo estado inicial empieza un proceso evolutivo potencialmente infinito y eterno. Pero, en cualesquiera de las formas que se quiera ver, siempre constituye un carácter potencial, en grado infinito, de su capacidad creadora. (Ver comentario exegético de la pregunta Nº 81).

Un tercer enfoque del término “infinito” se relaciona con el espacio. El espacio cósmico es infinito, caso contrario, -qué habría más allá del límite? Si hubiese un límite dejaría de ser infinito.

Dentro de la respuesta dada por los Espíritus al maestro Allan Kardec, se expresa: -“lo ignoto. Todo lo que es desconocido es infinito”-.

Esta parte de la respuesta, realmente, tiene dos vertientes: la primera, de carácter infinito; la segunda, expresa un límite o condición finita. Es decir, en realidad lo ignoto, lo que se ignora, es infinitamente ilimitado; no tiene fin, eternamente encontraremos un más allá. Empero, en lo referente a: -“Todo lo que es desconocido es infinito”-, puede señalarse que en la suma de todo, en el Todo o en un área determinada, no en su número, sino en su potencial o posibilidades, lo desconocido es infinito, pero, en términos relativos, no todo lo desconocido es infinito. Por ejemplo: si a todas las galaxias existentes, aunque su número sea desconocido para nosotros, les agregáramos una más, dejarían de ser infinitas y así ocurrirá con todas las cosas en cuanto se refiera a su cantidad, cualidades y características. Pero, en cuanto al potencial y variantes de sus manifestaciones y aplicaciones, en todos los ámbitos, conservará su carácter infinito e ilimitado. Sin embargo, encontrándose el Universo en constante expansión, lo que aún siendo limitado, en un momento dado, se encuentra en constante crecimiento, lo cual ratifica que todo potencial es de carácter infinito.

III. (3) Podría decirse que Dios sea el Infinito?
-“Sería una definición incompleta por la limitación del lenguaje humano, insuficiente para expresar las cosas que son superiores a vuestra inteligencia”-.

Dios es infinito en sus perfecciones; empero, el infinito es una abstracción. Decir, por lo tanto, que Dios sea el infinito, sería tomar el atributo por el sujeto, y definir una cosa ignota por medio de otra igualmente desconocida.

IV. (4) En qué puede tenerse la prueba de la existencia de Dios?

-“En un axioma que aplicáis a vuestras ciencias: No existe efecto sin causa. Buscad la causa de todo lo que no sea obra del ser humano y vuestra razón os responderá”-.

Para creer en Dios, es suficiente observar las obras de la Creación. El universo existe; por lo cual tiene una causa. Dudar de la existencia de Dios, sería como negar que cada efecto tenga una causa, y afirmar que la nada haya podido producir alguna cosa.

V. (6) El sentimiento íntimo que tenemos en nosotros mismos de la existencia de Dios, -no podría ser una consecuencia de la educación, y el producto de ideas adquiridas?

-“Si esto fuese así, -cómo tuvieron este sentimiento, también, las gentes primitivas?
Si el sentimiento de la existencia de un Ser Supremo fuese el producto de la instrucción, no sería universal, y no se encontraría, como las nociones de las ciencias, mas que en los individuos y en los pueblos cultos.

VI. (8) Qué se debe pensar de la opinión que atribuye la primera formación de lo creado a una combinación fortuita de la materia, es decir, de la casualidad?

-“Otra absurdidad! Cuál ser humano de buen sentido puede considerar la casualidad como un ser inteligente? Y, después, la casualidad, qué es? Nada”-.

La armonía, que regula las fuerzas del universo, demuestra combinaciones y principios determinados, y por lo tanto una potencia inteligente. Atribuir la primera formación a la casualidad, sería un absurdo, por cuanto en ella está ausente la visión y no puede producir los efectos inteligentes. Una casualidad inteligente dejaría de ser una casualidad.

VII. (10) Puede el ser humano comprender la naturaleza íntima de Dios?

-“No: necesitaría un sentido que le falta, desarrollar, aún”-.

VIII. (14) Dios es un ser distinto, o es, según la opinión de algunos, el conjunto de todas las fuerzas y de todas las inteligencias reunidas del universo.

-“Si así fuese, no existiría Dios, por cuanto Él sería el efecto y no la causa. Él no puede ser al mismo tiempo una cosa y la otra. De la existencia de Dios no podéis dudar; y esto es lo esencial. Hacedme caso y no vayáis más allá. No os perdáis en un laberinto, del cual no podríais encontrar la salida, lo cual no os haría mejores, quizá os rendiría un poco más orgullosos, por cuanto creeríais de saber, mientras que, en realidad, no sabríais nada. Poned aparte todos vuestros sistemas. Vosotros tenéis muchas cosas que os tocan más de cerca, comenzando por vosotros mismos; estudiad vuestras imperfecciones con el fin de liberaros, y esto resultará más proficuo que el querer penetrar lo impenetrable.

IX. (25) El Espíritu es independiente de la materia, o es en cambio una propiedad de esa, como los colores son una propiedad de la luz, y el sonido una propiedad del aire?

-“El uno es distinto de la otra; empero, es necesaria la unión de ambos para dar una inteligencia a la materia”-.

Es, quizá, igualmente necesaria esta unión también para la manifestación del Espíritu?

-“Es necesaria para vosotros, ya que no estáis organizados para percibir el Espíritu libre de la materia: las limitaciones de vuestros sentidos no lo permite”-.

X. (48) Podemos conocer la época de la aparición del ser humano y la de los demás seres vivientes sobre la tierra?

-“No; todos vuestros cálculos son quimeras”-.

XI. (54) Si la especie humana no procede de un solo origen, -deben los seres humanos continuar a considerarse como hermanos?

-“Todos los seres humanos son hermanos en Dios, por cuanto están animados por el Espíritu y tienden al mismo fin. Vosotros queréis tomar, siempre, las palabras literalmente”-.

XII. (58) Los mundos más lejanos del sol, -están, quizás, privados de luz y de calor, por cuanto el gran astro no tiene para ellos sino la apariencia de una estrella?

-“Creéis, vosotros, que no existen otras fuentes de luz y de calor fuera del sol? No contáis para nada la electricidad que en ciertos mundos tiene una función miles de veces más importante que sobre la tierra? Del resto, -quién os dice que todos los seres sean de vuestra misma forma y con órganos conformados como los vuestros?”-.

Las condiciones de existencia de los seres que habitan los variados mundos, deben ser apropiados al medio, en el cual son llamados a vivir. Si no hubiésemos jamás visto peces, no podríamos comprender que existan seres capaces de vivir en el agua. Lo mismo ocurre en los otros mundos, los cuales sin duda tienen elementos que nos son ignotos. -No vemos, nosotros, sobre la tierra las largas noches de los polos iluminadas por la electricidad de las auroras polares? Cuál es la imposibilidad de que, en algunos mundos, la electricidad sea más abundante que en la tierra, y tenga una acción general cuyos efectos aún nos sean incomprensibles? En consecuencia, aquellos mundos pueden llevar en sí mismos las fuentes de calor y de luz necesarias a sus habitantes.

XIII. (62) Cuál es la causa eficiente de la animalización de la materia?

-“Su unión con el principio vital”-.

XIV. (74) Se puede establecer un límite entre el instinto y la inteligencia, es decir, precisar donde termina el uno y comienza la otra?

-“No, por cuanto, frecuentemente se confunden; pero, en cambio, se pueden distinguir los actos que pertenecen al instinto de aquellos que pertenecen a la inteligencia”-.

XV. (81) Los Espíritus se forman espontáneamente, o proceden los unos de los otros?

-“Dios los crea, como todas las criaturas, con su voluntad; pero, repito, su origen es un misterio”-.

COMENTARIO EXEGÉTICO GIC: Cómo emanan los seres, del Ser Universal?


En primer lugar, el Ser Universal estaría formado por dos partes esenciales:

a) El Espíritu Universal, único, ENERGÍA comparable, si pudiésemos verle con la visión espiritual, a un FUEGO CÓSMICO en constante movimiento, o, a una luz como un fuego dorado, color equivalente al de la miel de abeja pura.

b) El Alma Universal: Podríamos definirle como el vehículo o cuerpo universal, del cual emana cada Espíritu a la conciencia individual, en los cuatro reinos naturales, de la siguiente manera:

• Cada vez que el Ser Universal desea otorgar vida individual a un nuevo ser, en los cuatro reinos naturales, el Espíritu del Ser Universal se une a esa alma individual que se encuentra inserta en el Alma Universal, -equivalente a una célula creadora- adquiriendo, a partir de ese momento, vida individual, eterna e inmortal, con todos los atributos divinos del Ser Universal, por cuanto es el mismo Creador Universal encarnado en esa alma individual e individualizado, sin separarse de la Totalidad del Ser Universal, siendo UNO con Él, indisoluble, Él –mismo- diferenciado en una UNIDAD del Alma Universal. Es el equivalente a la ENCARNACIÓN DIVINA, en todo el sentido de la palabra. Y cada Espíritu constituye una encarnación de la Divinidad en un alma individual que será su vehículo eterno individualizado y diferenciado, con libre albedrío y autonomía, sujeto a los parámetros de las leyes divinas, valores universales o atributos divinos.

• Es un proceso de ENCARNACIÓN DIVINA continúo y eterno, en forma gradual, de acuerdo a las necesidades de la Creación y la expansión universal.

• Esa alma individual en la cual se ha encarnado el Espíritu Universal, individualizándose, es como una célula creadora en el cuerpo humano, comparable a un espermatozoide etérico o espiritual, después de cuya unión de Dios con esa célula, emana a la conciencia individual el NUEVO SER individualizado.

• El lugar del cual emana a la vida individualizada, esa alma individual, por la encarnación de la Divinidad como Espíritu personalizado, constituirá el espacio cósmico de cada ser en el Ser Universal, con el cual estará indefectiblemente unido con un hilo fluídico elástico, análogo al hilo de plata, fluídico y elástico, que constituye el alma,-peri-Espíritu-, que une el Espíritu con el Cuerpo.

• Gran número de doctrinas y personajes lúcidos de diferentes épocas han expresado, en algún grado, y en diversas formas, esta verdad, sin entrar en detalles, lo que, en síntesis, se refleja en lo antes expuesto; empero, la reseña que antecede permite formarse una idea clara de cómo se lleva a cabo el proceso con exactitud.

• Quedaría una pregunta digna de meditación: El proceso de emanación a la conciencia individual, de acuerdo a la reseña que antecede, se realiza paralelamente y en forma diferencial, en cada uno de los seres de los cuatro reinos naturales, o en un solo ser individualizado a partir del cual va evolucionando, a nivel espiritual, -no físicamente- pasando de una especie a otra, de un reino a otro, por etapas, hasta ocupar el nivel humano?

• Nuestra percepción personal indica un solo e idéntico proceso de la encarnación de la Divinidad en un ser individual diferenciado.
• Cada reino natural posee Espíritu, alma y cuerpo, en un proceso idéntico.

• Aquí caben dos preguntas: 1) En los mundos muy avanzados, existen minerales, plantas y animales? 2) Sus Espíritus son los mismos que formaron parte de aquellos mundos primitivos e intermedios por los cuales pasaron las humanidades muy evolucionadas?

• Si estas preguntas tienen respuestas afirmativas, es decir, que: los Espíritus de los minerales, de los vegetales y de los animales que conforman los mundos muy evolucionados y que acompañan a las humanidades que los pueblan, han evolucionado paralelamente, y les han acompañados en el proceso evolutivo, hasta esta etapa superior, conservando su respectivo rango de mineral, vegetal o animal, entonces, la respuesta correcta a la pregunta formulada sobre el proceso de la encarnación de la Divinidad a nivel del alma individualizada, sería la de que, la Divinidad, siendo la misma, se encarna en cada reino natural individualizando el Espíritu respectivo y diferenciado de cada especie.

• Si el Espíritu humano debiese pasar por los procesos de transformación evolutiva, a nivel espiritual, por todas las variantes minerales, vegetales y animales, sería un proceso demasiado largo. Por lo menos, a nivel del planeta tierra, y de los mundos superiores en progreso al de nuestro planeta, el ser humano, desde su primera existencia, en la tierra, siempre ha sido humano. Esto se deduce claramente de la respuesta que obtiene, Allan Kardec, a la pregunta Nº 172 de El Libro de los Espíritus. Este tema, apasionante de por sí, amerita mayores análisis y meditaciones para dejarlo zanjado.

XVI. (85) Cuál de los dos mundos, el espiritual o el corpóreo, es el principal en el orden de las cosas?

-“El mundo espiritual; porque ha preexistido, y sobrevive a todo”-.

XVII. (92) Los Espíritus tienen el don de la ubicuidad? En otros términos: -puede el mismo Espíritu dividirse y estar en varios lugares a un mismo tiempo?

–“No; pero, cada Espíritu es un centro, que irradia en varias partes, por lo cual pareciera que se encuentre en varios lugares al mismo tiempo. Ved, el sol es uno, pero irradia todo alrededor y envía sus rayos muy lejos, sin dividirse en varias partes”-.

Irradian todos los Espíritus con la misma potencia?

-“Es evidente que no, por cuanto ésta depende del grado de su respectiva pureza”-.

Cada Espíritu es una unidad indivisible; pero puede extender su pensamiento en más direcciones al mismo tiempo. En esto solo consiste la facultad de la ubicuidad atribuida a ls Espíritus. De esta manera es un cuerpo luminoso que envía lejos sus rayos y puede ser visto desde todos los puntos del horizonte; así un ser humano. Que, sin cambiar de sitio y sin dividirse, puede transmitir órdenes, señales y movimientos en diversos lugares.

XVIII. (110) CLASE TERCERA: Espíritus prudentes. – Elevadísimas cualidades morales forman el carácter distintivo de estos Espíritus. Sin tener conocimientos del todo ilimitados, se encuentran dotados de una capacidad intelectual que le permite formarse un sano juicio sobre los seres y las cosas.

XIX. (114) Los Espíritus son por su naturaleza buenos o malos, o, en cambio, se van mejorando por su propia voluntad?

-“Son los mismos Espíritus que se mejoran por sí mismos, y, mejorándose, pasan de un orden al otro”-.

XX. (383) Cuál utilidad aporta al Espíritu su paso por el estadio de la infancia?

-“Por cuanto se encarna con el objetivo de perfeccionarse, en aquella edad el Espíritu es perceptible a las impresiones que recibe y que pueden estimular su progreso, y a este progreso deben contribuir quienes están encargados de su educación”-.

XXI. (403) Por qué no recordamos todos los sueños?

-“Lo que vosotros llamáis sueño es el reposo del cuerpo, por cuanto el Espíritu es siempre activo. En tal estado, él recupera su libertad, y se interrelaciona con sus seres queridos, sean éstos de la dimensión física o de la espiritual; empero, por cuanto el cuerpo es materia pesada o densa, le cuesta mantener las impresiones percibidas por el Espíritu por vías extra-sensoriales”-.

XXII. (404) Qué valor tiene la interpretación de los sueños?

-“Ninguna, como la entienden los pretendidos adivinos, por cuanto es absurdo creer que la realización de un acontecimiento pueda depender de un sueño, o bien, es absurdo creer que el soñar una determinada cosa anuncie su realización. Los sueños son verdaderos en cuanto representan imágenes reales para el Espíritu; pero, éstas, normalmente, no tienen ninguna relación con las vivencias de la vida corpórea, y son, como lo hemos dicho, reminiscencia de un pasado más o menos próximo. Sólo algunas veces, por vía excepcional, pueden ser un presagio del futuro, o la visión de lo que acontece en otro lugar, donde el Espíritu se proyecta”-.

XXIII. (405) Frecuentemente vemos en sueño cosas que parecen presentimientos, pero después no suceden. -Cómo explicarlo?

-“Ellas pueden verificarse para el Espíritu, si bien no para el cuerpo; por cuanto aquel va a encontrar las cosas y las personas en su nivel. Del resto, es preciso recordar que, durante el sueño, el Espíritu está siempre más o menos ligado a la materia, por lo cual no se libera jamás completamente de las ideas terrenas, por lo cual las preocupaciones de la vigilia puede dar a lo que se ve lo que se desea o teme. Esto, pero, no es más que un efecto de la imaginación, por cuanto, cuando la persona e vivamente preocupada por una idea, ella refiere a ella todo lo que ve”-.

XXIV. (421) Los letárgicos y los catalépticos generalmente ven y oyen todo cuanto acontece a su alrededor, pero no lo pueden manifestar: -lo hacen con los ojos y con los oídos del cuerpo?

-“No: con el Espíritu. Éste tiene conciencia de sí; pero no puede comunicarse”-.

-Por qué no puede comunicarse?

-“Porque el cuerpo se le opone. Tal estado particular de los órganos os da la prueba que en el ser humano existe, además del cuerpo, otra fuerza, la cual actúa mientras el cuerpo se encuentra inerte”-.

XXV. (435) -Puede el Espíritu ver los demás Espíritus?

Puede, pero depende del grado y de la naturaleza de su lucidez. Alguna vez él no se da cuenta con quien ha de tratar, y los toma por seres corpóreos. Esto sucede especialmente a quienes no conocen el Espiritismo, por cuanto no comprendiendo la esencia de los Espíritus, se asombran* y los creen corporalmente vivos”-.

De igual manera acontece después de la desencarnación en aquellos que se creen todavía encarnados: no se dan cuenta de algún cambio en torno a sí, creen los Espíritus vestidos de cuerpos similares a los nuestros y confunden la percepción del propio cuerpo por un cuerpo real.

XXVI. (491) -Cuál es la misión del Espíritu protector?

-“La de un Padre hacia sus propios hijos: guiar su protegido en la buena vía y ayudarle con consejos; consolarlos en las aflicciones, y alentar su coraje en las pruebas de la vida”.

XXVII. (508) Los Espíritus virtuosos que han dejado la dimensión física, -pueden, siempre, proteger a sus seres queridos, que, aún, permanecen en ella?

-“Su poder es más o menos limitado, y no siempre la condición en la cual se encuentran le dejan en plena libertad de actuar”-.

XXVIII. (517) Existen Espíritus que se dedican a proteger a toda una familia?

-“Existen Espíritus que protegen a los miembros de una misma familia, para que vivan juntos unidos por el afecto; empero, no los hay protectores del orgullo de los grupos étnicos”-.

XXIX. (527) Tomemos otro ejemplo: una persona que debe desencarnar fulminada, se refugia debajo de un árbol; el rayo le envía a mejor vida. -Han tenido alguna participación los Espíritus tanto en provocar el rayo como en orientarlo en dirección de la persona en particular?

-“Nos encontramos en un caso similar al anterior. El rayo se manifestó sobre aquel árbol y en aquel momento, por cuanto las leyes de la naturaleza así lo determinaron, y no porque aquella persona se encontraba debajo del árbol. Empero, la persona fue inspirada a proceder de aquel modo y refugiarse debajo del árbol sobre el cual debía caer el rayo. El árbol, de todas maneras, habría estado afectado tanto si la persona se refugiaba como si hubiese dejado de hacerlo, debajo de él”-.

XXX. (535) De las propias condiciones venturosas de vida, -es a nuestro Espíritu protector a quién debemos expresar gratitud?

-“Agradeced, primeramente, al Creador Universal, sin cuya voluntad, -por la Ley Cósmica-, no ocurre nada; después a los buenos Espíritus, quienes han sido los instrumentos”-.

-Qué ocurriría si dejáramos de expresarles nuestra gratitud?

-“Lo que les ocurre a los ingratos”-.

Sin embargo, -existen algunos que aún sin orar ni expresar gratitud, son exitosos en todo?

-“Sí, pero hay que esperar hasta el final; toda fortuna obtenida sin méritos, suele tener un costo inherente; cuanto más se haya recibido, tanto más hay que pagar”-.

XXXI. (538) Los Espíritus que presiden los fenómenos de la naturaleza, forman una clase especial? Constituyen una categoría particular de seres, o son Espíritus que estuvieron encarnados como nosotros?

-“Que fueron y que serán”-.

Pertenecen a los órdenes superiores o a los inferiores de la jerarquía espirita?

-“Según que su oficio sea más o menos inteligente. Los unos dirigen, los otros ejecutan; quien ejecuta las cosas materiales es siempre de orden inferior; así ocurre entre los Espíritus como entre los seres humanos”-.

XXXII. (548) Un Espíritu que asistiese a una batalla como simple espectador, -puede percibir la separación del Espíritu del cuerpo, en los caídos? Y, -cómo se le desenvolvería, bajo su mirada, este fenómeno?
-“Pocas desencarnaciones ocurren en forma instantánea. En la mayoría de los casos, el Espíritu, cuyo cuerpo ha sido afectado mortalmente, aún no ha adquirido conciencia de ello. Tan pronto lo perciba, se acerca al cuerpo, que permanece inerte, siendo la vida toda del Espíritu, es sólo a él mismo que se habla, y se dirige”-.

XXXIII. (664) Es de alguna utilidad orar por los Espíritus que han desencarnado y por aquellos que se presume que sufren? Si la respuesta es afirmativa, -cómo pueden nuestras oraciones ayudarles y abreviarles sus estados de afectación espiritual?

-“La oración no puede tener el efecto de cambiar los designios de Dios; pero, el Espíritu, por quien uno ora, recibe el estímulo de la demostración de afecto que se le da, por cuanto el ser que debe transmutar su estado de conciencia, es siempre grato de recibir el apoyo de quienes buscan su bien. Por otra parte, con la oración, el Espíritu es estimulado al arrepentimiento y al deseo de hacer lo que sea preciso para ser felices. En este sentido, pueden ser abreviadas las consecuencias, si de su parte hay el apoyo de su buena voluntad. El deseo de mejorarse, estimulado por la oración, llama a su lado Espíritus mejores, que van a iluminarle, a consolarle, y a darle esperanza. Jesús oraba por las ovejas descarriadas, mostrándoos, de esta manera, que seríais responsables, si vosotros no orarais por quienes lo requieran”-.

XXXIV. (694) Cómo juzgar las prácticas que impiden la reproducción para satisfacer la sensualidad?

-“Demuestran el predominio del cuerpo sobre el Espíritu y cuanto el ser humano se encuentra subordinado a la materia”-.

XXXV. (697) La indisolubilidad absoluta del matrimonio se encuentra en la ley natural o, únicamente, en la ley humana?


-“Es una ley humana contraria, en elevado grado, a la natural; pero, los seres humanos pueden cambiar sus propias leyes: solamente las de la naturaleza son inmutables”-.

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