martes, 16 de septiembre de 2014

TERCERA EPÍSTOLA A SOPHÍA


TERCERA EPÍSTOLA A SOPHÍA

©Giuseppe Isgró C.

Apreciada Sophia:
Gracias, por su carta y sus comentarios.
A continuación le comento los aspectos relativos a sus planteamientos:
Usted me pregunta: -“Por qué es contraproducente hacer confidencias a una persona allegada, acerca de los propósitos que queramos realizar?”
·                    Salvo las excepciones válidas, en cada caso, como las de informar a personas vinculadas, (a quienes se está, por deber moral, obligados de contar determinados proyectos que les involucre, con la verdad por delante, sea cual fuere), como el cónyuge, los hijos, u otros familiares, un socio, una persona con quien se vaya a contraer matrimonio u otra clase de compromiso, como noviazgo, etc., personal o comercial, es preferible ser reservados en los proyecto, por las siguientes razones:
·                    PRINCIPIOS GENERALES:
A) Sea quien fuere la persona que se le comente el proyecto que se desea realizar, instantáneamente se activan fuerzas contrarias, o antagónicas, cuya resistencia inherente se asemeja a un campo de fuerza adversa que será preciso dominar como un “handicap” extra. Es decir, para realizar el mismo proyecto costará más esfuerzo lograrlo con éxito si se comenta, sin importar quien sea el, o la confidente, -salvo los casos de rigor, y las excepciones que luego analizaremos-, que si se mantuviese en silencio, o en secreto.
·                    Podría decirse, como una constante: Si se habla del proyecto, dejará de realizarse.  
·                    Si el proyecto que se desea llevar a cabo es muy importante, es preferible no decir nada a nadie; salvo, por supuesto, las muy pocas, y puntuales, excepciones.
B)                     A nivel mundial, muchas personas se han dado cuenta de este principio, razón por la cual, mantienen sus proyectos en silencio, mientras estén, aún, por concluir exitosamente. Esa es la regla: Hasta no realizar algo, no decirlo a nadie. Después ya no importa, por cuanto el objetivo está logrado.
·                    En el argot popular se suele decir: -“En boca cerrada no entran moscas”-. En algunos sentidos, esto tiene alguna vinculación. Hemos mencionado, en diversas partes, que: La naturaleza trabaja en silencio; es preciso emularla.
2.         Mientras mas allegada sea  la persona, más fuerza antagónica genera.
·                     Esto se explica por cuanto la persona más allegada puede tener más intereses en contra de la realización del proyecto;  pongamos unos ejemplos:
A)                En el caso de un joven con sus padres: Éste le cuenta sus proyectos, -de la índole que fueren-. Ambos progenitores, o uno de ellos, enseguida comienza a pensar en los peligros, imaginarios o reales, que su hijo, o hija, correrá, y en silencio, o por medio de la persuasión, comenzará(n) a sabotearle para que no realice su proyecto, sugiriéndole una enorme cantidad de razones en contra, -que de todas maneras, casi siempre, dándose el caso, hay que tomar en cuenta, porque muchas veces son realistas. Hay excepciones a la regla, y estos constituyen el 20% de los casos, sin que por ello, se deje de activar la fuerza antagónica en contra. Lo que ocurre es que el joven se impone sobre la resistencia y frente a las evidencias de que nada doblegará su voluntad, los demás se ven obligados a respetar su propósito. Pero, hubo un combate entre fuerzas, y se sigue manteniendo, aún, en el tiempo, lo que está acallada es la voz antagónica, pero tan pronto el joven tenga un pequeño tropiezo, emerge enseguida, diciéndole: -“Hijo, no te lo dije yo que no te metieras en eso, y un largo etcétera que cada quien ha oído, u observado, muchas veces.
 Pero hay cualquier clase de variantes, y los padres suelen tener muchos intereses ocultos en relación con los hijos. Asesorando a un gran número de personas, en el ámbito de nuestra actividad como consultor jurídico-inmobiliario, hemos podido observar casos que son inauditos. Esa es la razón por la cual se dice: -“Una cosa es lo que piensa el burro y otra quien lo arrea”-.
B) El hombre le cuenta a la esposa que piensa desarrollar un proyecto a nivel nacional, o internacional: lo que le significará tener que viajar, constantemente. En este caso, la esposa se la ingeniará, sutilmente, disuadiéndole para que no haga tal cosa, con miles de imaginarias circunstancias, o reales, tal vez, cuyos efectos maximizará. El temor del riesgo de las “aventuras” que podrá tener el hombre, -en las cuales él ni siquiera ha pensado- generará fuerzas adversas en contra del proyecto, a nivel objetivo, y al subjetivo: Invisible y/o mental. (Psicoquinesia, o telequinesia, es decir, la acción de la mente a distancia, por medio de la imaginación, del temor y de las expectativas negativas. Por supuesto, en personas positivas al 100%, se activan fuerzas  creadoras favorables).
C)     La esposa le cuenta al esposo su proyecto –de la índole que fuere-, y él se va a representar, mentalmente, que si la señora tiene éxito va a adquirir excesiva independencia, y él perderá poder sobre ella.
·  O bien, el desarrollo del proyecto significará viajar, salir, visitar gente, todo ello le da más independencia a la señora, posibilidades de aventuras, entre otras cosas, entonces él comenzará a sabotearle, con muchas sutilezas, con tacto y habilidad, en los más recatados; en otros, con la imposición poco respetuosa, y hasta rayando en poca cortesía. (Por supuesto que, hoy en día, la mujer es más independiente que antes, pero, salvo excepciones, el principio sigue siendo válido, porque tenemos al mismo hombre, y a la misma mujer, en el fondo).
·  Hemos visto, también, todas clases de variantes, por supuesto muchas de ellas inimaginables, que no merece la pena reseñarlas. Cuestión de egoísmo, tal vez, o de ausencia de amor, o simplemente de confianza en sí.
D)            Al mismo tiempo se suelta la imagen del proyecto que se desea realizar:
·             Al hablar del proyecto que se desea ejecutar, se suelta la imagen del mismo, y otras ideas van a suplantarle en la mente, y éstas son las que van a activar las fuerzas regidas por la ley de atracción.
·             Estas otras ideas son las antagónicas que en forma verbal, o telepáticamente, las personas a quien se les comunica el proyecto, comienzan a enviar, sistemáticamente, a veces hasta muchos meses después, o años. (Hay numerosas observaciones al respecto).
·             En algunos casos, es de tal magnitud la reacción antagónica, y tan notable, que se hace preciso usar esta estrategia: En conversación normal con la persona a quien se le contó el proyecto, como quien no quiere la cosa, se le dice: -Oye, sabe que desistí de aquel proyecto que te había contado; llegué a la conclusión de que no valía la pena. Acto seguido se pasa a otra cosa. Pese a lo cual, no dejarán de ser reveladores los comentarios de la otra persona. En todo caso, se notará como aquella persona experimenta un “alivio” al saber que usted se ha dejado de eso. (Realizando el proyecto, el amigo, o la amiga, sale del montón del cual él forma parte. El egoísmo tiene muchas vertientes ocultas de expresiones).
E)      Si no se habla, se mantiene la idea en la pantalla mental, con mayor posibilidad de lograr el éxito en el proyecto.
·  Pese a todo, es preciso escribir los objetivos, para darle carácter de permanencia, practicar la autosugestión, para fijarlos en la mente objetiva, y transferirlos en la subjetiva, -ordenador mental, y visualizarlos ya realizados, en su etapa culminante, sin anteponer canal de manifestación alguno, dejando a la mente psiconciente encargada del logro.
·  Esto quiere decir, que hay que dejar que la vida traiga el resultado por el canal que ella –por la ley cósmica- lo crea mejor, sin imponerle que sea obtenido a través de un conducto determinado, que podría ser el inadecuado. La sabiduría de la vida es infinita.
F)      Es decir: de por sí, las ideas suelen saltar de la pantalla mental, con facilidad, pero, se sueltan totalmente al hablar de los proyectos. Entonces, el esfuerzo por sujetarlas, es mayor, y se corre el riesgo de no llevar a cabo el proyecto.  Al hacerlo, la mente lo aleja de su centro de poder, que es la imagen en la pantalla mental, donde crea un campo de fuerza magnética que atrae a los elementos coadyuvantes y repele a los contrarios, por la ley de atracción cósmica.
G)     LA IMAGEN EN LA PANTALLA MENTAL: si la idea del proyecto permanece constantemente, allí, por la rememoración continúa, por la imaginación del proyecto realizado, visualizándolo, etc.; dado que las imágenes tienen fuerzas de atracción y de repulsión, si las mantenemos en la mente, relativas al proyectos, ellas son como un imán: Atraen a los elementos análogos y coadyuvantes a su logro, y repelen los contrarios.
·       El centro de poder es la pantalla mental, las semillas son las ideas del proyecto, y las ideas son, a la vez, imágenes mantenidas en la pantalla mental. Son fuerzas, de doble polaridad, que atraen como un imán.
·       Atraen las mismas cosas que se piensa o se siente, o se imagina, o se teme. Lo semejante atrae lo semejante. Los opuestos jamás se juntan. El aceite se mezcla con el aceite, el agua con el agua. El aceite y el agua no se mezclan, aunque estén juntos.
H)      Quiere decir que cuando deseamos realizar un proyecto, la mente lo atrae, pero si lo comentamos con alguien, la mente lo aleja? Por qué? Por lo siguiente:
PRIMERO: Al hablar del proyecto, la idea del mismo sale de la mente, Se suelta, y otras pasan a ocupar su lugar, y cuesta volver a reubicarla. (Hasta se llega a olvidarse de ella).  Es algo que se puede observar con un poco de atención. Al salir la idea de la mente, donde fungía de imán, deja de atraer a los elementos coadyuvantes inherentes. Es decir, se alejó la idea del centro de poder que es la pantalla mental, donde, al centrar la atención en la misma, se expande la conciencia sobre ella, y se activa el poder creador, tanto para su realización, atrayendo a los elementos coadyuvantes, como, también, un medio protector, aislando los elementos antagónicos, esa es la razón por la cual, a la fuerza de repulsión se de denomina: Ley de aislamiento cósmico.
SEGUNDO: La fuerza antagónica que se ha creado, es un poder adverso que va a obstaculizar la realización del proyecto, lo cual significa que habrá de emplearse más a fondo para realizarlo, pero, la mayoría de las veces, deja de hacerse.
·                          Entonces, por qué correr riesgos? Es mejor realizar los proyectos emulando a la naturaleza; en silencio. De esta manera, uno se asegura de que no interferirán fuerzas antagónicas que habrá, luego, que vencer, con un esfuerzo extra.
El libro Cómo desarrollar la Auto-Maestría, en sus dos primeros capítulos habla de este aspecto, y de otros inherentes, pero las ideas son, en esencia, las reseñadas aquí.
Entonces, surge la pregunta: -A quién podemos comentar nuestros proyectos?
·                   A LOS ASESORES PROFESIONALES: Están acostumbrados a ayudar a la gente a alcanzar sus propósitos, de cualquier índole. Generan fuerzas positivas y estimulantes. Hay que elegir bien al asesor, sea cual fuere el área inherente. Siempre es bueno centrar la atención sobre el paso en que se desea recibir la cooperación, sin entrar en detalles sobre el proyecto total, que debe permanecer en reserva, aún con los expertos.
·                   A los socios, a los usuarios, a la gente interesada en el proyecto, quienes sí van a prestar su concurso para su logro. Con todo, hay que hacerlo, cuando ya se haya consolidado y esté firme, y siempre, hablando de un paso a la vez, sin revelar la meta final a nadie.
·                   Hay excepciones, que cada quien sabrá cuales son.
       Es preciso mantener en silencio, también:
 1) Cuando el proyecto atraviesa por sus fases críticas o menos fáciles. No hay que hablar de ellas con nadie, ya que ello maximiza los efectos negativos. Hay excepciones: las personas de las cuales se precisa ayuda, -y sin entrar en detalles-, dando por hecho que todo está bien, ya que, si la persona no tiene confianza, cómo la va a estimular en los demás?
·                   Los problemas, son la salsa de la vida, los que mueven el mundo, y le dan sentido direccional a la existencia. Esto quiere decir, que si no hubiesen situaciones por resolver, no existiría la vida. Por lo cual, las situaciones por resolver, suelen constituir  las mayores oportunidades que la vida aporta, al igual que la nuez dentro de la cáscara.
·                   Las situaciones y los proyectos, en todas sus variantes, expresan el poder potencialmente infinito que posee el ser humano, siempre que los atienda, los asuma y los afronte, sin abandonar a mitad del camino, siguiendo hasta haberlos resuelto, o alcanzado.  
·                   En el momento en que cada quien se niega en abandonar, se activa el poder creador de la mente, y comienzan a surgir las coincidencias coadyuvantes a la solución o al logro, respectivamente.
Aquí pasa algo similar con los proyectos, pero en sentido inverso:
·                   Cuando hablamos de las situaciones por resolver, en sus fases menos fáciles: Una persona escucha el relato de los problemas, los maximiza, y luego, lo cuenta a otra, y ésta, a su vez a otra, y así sucesivamente. (Cada persona tiene un promedio de 250, o más, interrelacionados, por lo cual, en pocos días, pueden conocer esa situaciones miles de personas, con solo contar el caso a una amiga, o amigo, de estrecha amistad).  Cada una los maximiza más, se los supone más grandes de los que son al hablar  y al imaginarlos los crea por el principio de donde se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. Se va creando un campo de fuerzas abrumadoras en un gran número de personas comentadoras, quienes, centrando la atención en la que contó, originalmente, la situación, las recibe, telepáticamente, las cuales son fuerzas adicionales que tiene que vencer. Es el mismo principio: Donde centramos la atención, se expande la conciencia, y se activa el poder creador.  
·                   Si se centra la atención en los problemas, se activa la ley de atracción en ellos. Si se centra la atención en la solución, o en los objetivos, se canaliza positivamente, tanto las ideas obtenidas por la lógica inductiva y deductiva, como por la intuición y la inspiración, sobre el qué, el cómo, el cuándo, el dónde, el quién, el cuánto y el por qué, así como la fuerza creadora-motivadora inherente y suficiente a la magnitud de cada caso. Pero, en ambas vertientes, el silencio es creador, coadyuvante, y positivo, para cualquier persona.
·                   Probablemente, el problema ya esté resulto a los tres días, y, sin embargo, varios meses después, ese grupo de personas por donde ha circulado la información, probablemente sigan pensando que la que lo contó, lo siga teniendo, y muchas de ellas, hasta se le pueden alejar, ya que, un buen número de personas no quieren tratar con quienes tienen problemas, salvo excepciones.
·                   Esto puede afectar, también, el crédito personal. Cosas de humanos.
DESGASTE DE ENERGÍA:
·        Hablar de los propios objetivos, o situaciones desgasta la energía.
·        Activa la atención a nivel objetivo, y aquí está el verdadero secreto: Conversar, necesariamente, retrae a la persona a la dimensión objetiva, sustrayéndola de la dimensión subjetiva, que es donde se encuentran los poderes creadores de la mente; es decir: En el interior.  
·        Por eso se dice que para conectar con la Divinidad es preciso descentrar la atención del ego, e interiorizarla en el yo interno, y desde este centro de poder, conectarla con la fuente. En esa dimensión interior, creadora, sosegadora, inspiradora, se activan las ideas y las fuerzas coadyuvantes.
·        Por todo esto, es preciso hablar solo de cosas positivas, y cuando alguien cuenta cosas negativas de otros, atajarle, sugiriéndole: -Háblame de todo lo bueno que sepa de otros, nada negativo y salir de ese círculo cuanto antes.
·        Otro punto, es el de la conveniencia de no hablar sobre la salud. Sea cual fuere el estado en que la persona se encuentre, siempre debe decir que está bien; luego, cambiar de tema, enseguida.
Sophia, he colocado estas breves  ideas tal como han surgido. De haber algún aspecto adicional, será un placer comentarlo. Es un tema muy interesante.
Adelante.


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EL ENCUENTRO EN LA VICTORIA



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UN ENCUENTRO EN LA VICTORIA

Autor: ©Giuseppe Isgró C.

Del libro: La Victoria

Capítulo I

Me encontraba un día, en una fuente de aguas tranquilas, cristalinas, cuando se me acercó un Venerable hombre, vestido a la antigua usanza, con bata blanca, larga, pelo y barba que alguna vez fueron de color pelirrojo y un báculo en la mano derecha.

Concentró sus ojos en los míos; su mirada era profunda, serena y apacible.

Con voz suave y afectiva, me dijo:

-“Hola, hijo, como estás”-.

–Bien, -le contesté-; y, ¿usted?

–Por aquí andamos; -fue su respuesta-, mientras me sonreía.

-¿Dónde estamos?, -le pregunté al Venerable hombre-.

-Este sitio es conocido como La Victoria; -me contestó-. –¿Qué haces por estos lados?

-Salí esta mañana, temprano, con el coche, a dar un paseo; luego, al llegar a esta zona, me paré a contemplar la belleza de los araguaneyes y decidí caminar un poco y la verdad que, absorto en mis reflexiones, caminé por lo menos durante dos horas, hasta llegar aquí. Desconocía este hermoso lugar. Y, usted, -¿vive por aquí cerca? -le pregunté-.

Un poco más arriba, en esa colina boscosa. Hace algunos años, -relata el Venerable hombre- decidí retirarme de la agitada vida ejecutiva en que me desenvolvía profesionalmente, como abogado, en la ciudad de Quebec, Canadá, aunque he viajado por diversos países asesorando a incontables líderes. Construí la casa, en esta zona tropical, con la idea de pasar aquí los meses de invierno. Me dedico al estudio de la vida, a la meditación y a cultivar mi jardín y de vez en cuando, a escribir mis reflexiones, las cuales, algún día, habrán de ser publicadas para esparcir un poco la luz que he podido vislumbrar en mis estudios metafísicos-espirituales.

-¿Quieres tomar un café? –Me preguntó el Venerable hombre-. Lo he traído de Caripe El Guácharo; es de los más exquisitos que he probado.

-Sí, con gusto se lo acepto; -le contesté-.

Nos fuimos caminando por un sendero rodeado de árboles cargados de mangos, aguacates, naranjas y una hilera de cayenas de diversos colores. A lo lejos, el ruido de la brisa se oía apaciblemente. Todo era quietud, armonía y paz. Pero, sobre todo, lo que más me impresionaba era la apacibilidad y el sosiego del Venerable hombre de La Victoria. Emanaba de él un flujo de fuerza que, en su presencia, me sentía con un poder y una seguridad nunca antes experimentados. Fuerzas bienhechoras se iban apoderando de mí y aquella paz y relax que buscaba en la mañana, al salir a dar un paseo, sin percatarme de ello, las estaba experimentando ya.

Después de unos quince minutos de caminar, llegamos a la casa del Venerable hombre. Su aspecto exterior humilde estaba lejos de dejar entrever lo que segundos después habría de asombrarme con lo que encontré en el interior.

Al entrar, en la casa, una joven de unos veinte años saludó al Venerable hombre.

-¡Hola, abuelo!, ¿cómo estás?

–Bien, hija, -contestó el Venerable hombre-. -Prepara un poco de café, Lucía, mientras conversamos un poco, adentro.

-Por cierto, te presento a Santiago, quien ha llegado paseando hasta La Victoria.

Después de la presentación, entramos en la biblioteca del Venerable hombre. Un salón grande, lleno de estantes de libros por todas partes, lo cual hacía inimaginable dicho cuadro desde el exterior. Algunos cuadros al óleo de morichales y de personajes históricos, presentaban un ambiente acogedor. En un rincón se encontraban diversos retratos de Tagore, Gandhi, Cicerón, Séneca, Ibn Arabi y un dibujo de Don Quijote y Sancho Panza. En un pequeño cuadro, podía leerse: -“Lo que Alá quiera. Nada se le asemeja”-.

-Le felicito por este inmenso tesoro que usted tiene aquí, -le dije al Venerable hombre-. -¿Cuáles son los temas de su interés?

A lo cual, me contestó: -Como usted puede ver, Santiago, -y me invitó a recorrer los estantes- aquí hay libros de variados temas: clásicos de todos los países y épocas, desde los Vedas, los Upanishads, el Mahabaratha, los libros de Confucio, El Tao te King, de Lao Tse, el Poema de Gilgamesh, el Código de Amurabí, autores griegos, como Homero y Hesiodo. Se encuentran las obras completas de Euclides, Platón, Aristóteles, Teofrasto, Demetrio de Falereo, de los Presocráticos, Epicteto, Plutarco, etcétera; de los latinos, autores como Séneca, Cicerón, -que son mis preferidos-, Julio César, Tito Livio, Dionisio de Halicarnaso, Marco Aurelio, así como libros de Psicología, Gerencia, Sufismo, Yoga, ensayos, filosofía, parapsicología, hermetismo, El Quijote, libros de economía, filosofía, etcétera, en fin, un poco de todo lo que es preciso conocer para poder entender el significado de la vida: de dónde venimos, por qué estamos aquí y hacía dónde vamos, sin lo cual, la vida no tendría sentido, sobre todo por el gran afán a que está sometido el ser humano en la agitada vida moderna.

Nos sentamos en sendas butacas y nos entretuvimos conversando de temas diversos. Al poco rato, entró Lucía con dos tazas de oloroso café y unos biscochos, que degustamos con agrado en una amena e interesante conversación. Al fondo, podía oírse una suave música de Beethoven.

Pasamos cerca de una hora conversando de sobre la Atlántida, Egipto, los griegos, de Homero, de los sufíes, del budismo zen, los poderes del espíritu, meditación, etcétera, después de lo cual, le hice una pregunta directa.

-Seguramente, usted ha desarrollado alguna técnica de meditación y algún método de resolución de situaciones, en la vida, que me quisiera explicar, ya que, según observo, para tener usted una serenidad tan acentuada y una fortaleza física a la edad que imagino que usted debe tener, -cerca de noventa años- es porque ha encontrado en su larga experiencia algún secreto que quizás quisiera compartir conmigo.

Santiago, -me dijo el Venerable hombre, si vuelves a visitarme otro día, quizá te cuente algo que te pueda servir. Empero, antes de que te vayas, te haré entrega de unos apuntes que hace ya muchos años, en una época en que yo andaba a la búsqueda de sosiego y tratando de encontrarle sentido a la vida, un Venerable hombre que, en una edad similar a la mía, a su vez me entregara y cuya práctica asidua me permitió domar la mente, encarrilar mi vida y poner bajo control los hilos del destino. Son veintidós manuscritos, y una meditación diaria, –continuó diciendo el Venerable hombre, que si bien son ya un poco antiguos, podrás copiarlos de nuevo y si pones en práctica las técnicas que contienen, darás a tu vida un esplendor que habrá de sorprenderte agradablemente.

-Una vez que los hayas probado con total y absoluta satisfacción de tu parte, -me dijo, ponlos en limpio, en forma de libro y publícalo para que su mensaje llegue a mayor número de personas. Hacía tiempo que esperaba a alguien a quien confiarle este legado y creo que hoy, al llegar aquí, en la forma en que lo has hecho, tus pasos han sido dirigidos por Aquel que todo lo sabe y puede, por la Ley Cósmica, y en cuyos planes universales, todos somos sus instrumentos.

Me despedí del Venerable hombre y de su adorable nieta, sintiendo dentro de mí fuerzas desconocidas hasta entonces que preanunciaban grandes cambios en mi vida.

En los días siguientes, aparté una hora diaria, antes de dormirme, y leí y releí, todos los manuscritos, de la siguiente manera: En primer lugar copié la Meditación diaria en un cuaderno, el cual leí durante veintidós noches y mañanas seguidas, tal como lo indicaban las instrucciones de la misma.

Una nota al pie de página mencionaba que si yo la transcribía en un cuaderno, el hecho de hacerlo, grabaría en mi ordenador mental las instrucciones y me sería más fácil desarrollar, en mi personalidad, las cualidades y condiciones que formaban parte de los objetivos implícitos en la misma.

De los veintidós manuscritos, cada lunes, a las once en punto de la noche, copiaba uno en el cuaderno, y durante el resto de la semana, a la misma hora, lo leía y meditaba, siguiendo las fáciles y efectivas técnicas e indicaciones al inicio del mismo.

Cuatro semanas después de leer durante veintidós días seguidos, en la noche y en la mañana, la meditación diaria, comenzaron a manifestarse en mi vida una serie de cambios positivos que me dejaban asombrado a mi mismo, pero, también, los miembros de mi familia y a mis amistades; sobre todo mi semblante comenzó a ser más apacible; volví a sonreír desde el interior; mi estado anímico era de contento; me sentía más seguro de mi mismo; comencé a confiar más en la gente, en la vida y a vislumbrar el sentido de mi misión en la vida –percibía cosas que antes me pasaban desapercibidas, a pesar de haber estado siempre allí. Sentía fluir en mí una nueva corriente vivificadora de prosperidad, de felicidad, de alegría de vivir. Mi entusiasmo y amor por la vida y por mi familia, por mi trabajo y por las personas, crecía día a día. En aproximadamente dos meses había logrado muchas de las cosas en las cuales había soñado desde hacía años. Había dado un paso sorprendente en el camino de la autorrealización.

Efectivamente, pude comprobar que me fue relativamente muy fácil desarrollar las aptitudes y actitudes a nivel físico, mental, emocional, espiritual y en diversos aspectos de mi vida, como el financiero, que comenzó a mejorar casi inmediatamente, así como, surgieron nuevas oportunidades que comencé a aprovechar, casi sin esfuerzo de mi parte.

Transcurría el año de 1967 y mi vida había encontrado un sendero que habría de conducirme a cooperar en forma más efectiva en el plan divino que el Supremo Hacedor, en algún momento, había diseñado para mí.

Tres meses después volví a aquel lugar donde había encontrado al Venerable hombre de La Victoria y allí estaba la fuente que él dijo llamarse La Victoria; empero, cuando traté de encontrar el camino para llegar a la casa donde amablemente me ofreció un delicioso café, preparado por su nieta Lucía, no logré encontrarlo, pese a haber recorrido durante un par de horas por los alrededores. Pregunté a varias personas para ver si podían indicarme como llegar a la casa del Venerable hombre y cual fue mi sorpresa, nadie lo conocía.

Empero, después de tanto buscar, volví a encontrar la casa donde vivía el Venerable hombre de La Victoria, pero se encontraba abandonada. Su aspecto indicaba que debía encontrarse en ese estado un lapso mayor del que mediaba con el encuentro de aquel ser extraordinario. Es sorprendente como los inmuebles solos acusan el paso del tiempo en mayor grado que los que son habitados. Si no fuera por los manuscritos pensaría que el encuentro no fue más que un simple sueño. -¿O se trata, acaso de un sueño combinado con un fenómeno de aporte? Personalmente, no lo creo. El encuentro fue muy vívido y real. El aromático café servido por Lucía estaba exquisito. Durante varios años volví al lugar varias veces, la casa seguía sola. La última vez que volví, no la pude ubicar y sin tener tiempo suficiente para seguir buscándola, me fui. Ahora, vivo muy lejos de aquella zona, en otro continente; han transcurrido muchos años y después de tanto tiempo es poco probable que vuelva allí; pero, los manuscritos y la meditación diaria obran en mi poder, me han transformado y han enriquecido mi vida.

Durante más de treinta y cinco años he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen los manuscritos y la meditación diaria y cada vez que los pongo en práctica, experimentos los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para mí.

Su contenido es eminentemente práctico; no hay teorías superfluas. Si lleva a cabo los ejercicios que contienen, es probable que, gradualmente, se vaya efectuando la transmutación alquímica de su ser sintonizándose con los elevados resultados existenciales, los cuales, por añadidura, al ser creados a nivel mental, se van manifestando en su propia vida, oportunamente.

Sobre todo, con estos ejercicios, me percaté, cuando el Venerable hombre me entregó los manuscritos, de que se dispone de un método para domar la mente y ejercer un pleno dominio sobre la vida en general y, por ende, sobre el destino y controlar, cuando eventualmente se presenten, todas las situaciones, manteniendo un perfecto equilibrio físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

El Venerable hombre de La Victoria me comentaba que todo se puede lograr en la vida si se siembra la respectiva semilla por medio de correctas decisiones acordes con la propia y elevada auto-estima y dignidad personal, desarrollando el convencimiento de que sí se puede hacer, por medio de las afirmaciones, las visualizaciones y meditaciones, la experimentación de un estado emocional acorde al momento de ser logrados los respectivos resultados y la practica del desapego, es decir, dejar encargada a la mente psiconsciente del logro, y además, se espera el tiempo necesario haciendo, mientras tanto, todo lo que se requiere, según el caso o los objetivos por alcanzar.

Estas técnicas funcionan, me decía una y otra vez el Venerable hombre de La Victoria; luego, agregaba: -las he probado por más de cincuenta años y quien, a su vez me las entregó, habría hecho otro tanto, aseverando que eran efectivas, si yo seguía fielmente las instrucciones y las ponía en práctica con expectativas positivas.

Desde que en 1967, el Venerable hombre me hiciera entrega de los manuscritos, han transcurrido un poco más de de treinta y cinco años, durante los cuales yo también he puesto en práctica las diversas variantes de los ejercicios, afirmaciones y meditaciones que contienen, y cada vez que me ejercito con ellos, experimento los mismos beneficios. Ahora, ellos se encuentran en el libro que usted tiene en sus manos; espero que les sean tan útiles como los han sido para todos los que hemos aplicado las enseñanzas del Venerable hombre de La Victoria.

Él me repetía constantemente: -“¡Tú puedes si crees que puedes hacerlo! ¡Hazlo y tendrás el poder!

Recuerdo que ese día el Venerable hombre me dijo: -ejercer el poder con que la naturaleza de las cosas ha dotado a cada ser, cultivando los dones inherentes y aprendiendo todo lo que se pueda de sí y del vasto universo del que se forma parte, es una manera efectiva de ser cada día más feliz. Luego, cuando me despedí de él, expresó: -“¡Que cada día brille más y mejor tu luz interior!”.- Adelante.

Capítulo 2

Meditación diaria

Es lunes en la noche, son las once en punto.

Me dispongo a copiar textualmente, en el cuaderno que he dispuesto para ello, el manuscrito identificado con el título:

Meditación diaria

Dice así:

Afirme, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desee, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubra cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en su vida:

MEDITACIÓN DIARIA

Afirma, en la mañana y en la noche, antes de dormir, durante veintidós días; luego, cada vez que lo desees, esta poderosa fórmula de programación mental positiva y descubre cómo, con facilidad, van ocurriendo cosas maravillosas en tu vida. Al encender la luz en la mente se ilumina la propia existencia y todo en derredor vibra al unísono y con el mismo sentimiento de felicidad y bienestar, interrelacionándose por la ley de afinidad.

1. -Entro en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, contando de tres a uno: Tres, dos, uno.

Ø Ahora, estoy ya en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre.

Ø Voy a permanecer en el nivel de mi mente psiconsciente, en el centro de control de mi piloto mental automático, donde todo va bien, siempre, durante quince minutos y voy a programar los siguientes efectos positivos, los cuales perduran, cada vez mejor, hasta que vuelva a realizar este acceso y programación mental:

Ø Todo va bien, siempre, en todos los aspectos de mi vida, cada día mejor. (Tres veces). –Imagínalo-.

Ø Todo va bien en mi trabajo; cada día logro mejores niveles de efectividad, prosperidad, riqueza, abundancia y bienestar. (Imagínalo).

2. Formo una unidad cósmica perfecta con el Creador Universal, -ELOÍ. (Diez veces, con los ojos cerrados). Hoy se expresa en mí la Perfección universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión en todos los aspectos de mi vida.

3. -Cada día, en todas formas y condiciones, mi cuerpo y mi mente funcionan mejor y mejor. La consciencia de mi conexión permanente e indisoluble con el Creador Universal, -ELOÍ-, restablece y mantiene en mí, diariamente, durante las veinticuatro horas del día, un perfecto estado de salud a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Creador Universal, por darme un cuerpo perfecto, saludable, lleno de energía. Aquí y ahora, me siento en perfecto equilibrio de salud, a nivel físico, mental, emocional y espiritual.

4. Afronto y resuelvo bien toda situación que me compete, siempre.

5. Todo tiene solución, en todas las situaciones de mi vida.

6. El Creador Universal, -ELOÍ-, es en mí, cada día mejor, en todos los aspectos de mi vida, fuente de amor, luz, sabiduría, éxito, riqueza, prosperidad, abundancia y armonía.

7. Permito que las leyes universales de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión actúen bien en el plan de mi vida.

8. Tengo prosperidad y poder. Cada día enriquezco mejor mi vida a través del servicio efectivo, del amor y de la práctica de todas las virtudes.

9. Mi dignidad personal me lleva a realizar las cosas que me competen con la máxima perfección posible.

10. Cada día, en todas formas y condiciones, en todos los aspectos de mi vida, estoy mejor y mejor a nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero.

11. Actúo con templanza, serenidad, autodominio y perfecto equilibrio en todo. Conservo plena autonomía y control sobre todas mis facultades físicas, mentales, emocionales, intelectuales y espirituales. Hecho está. (Visualizar un escudo protector de luz que te envuelve y protege; -una pirámide-).

12. Tengo fortaleza, valor, confianza y fe suficiente para triunfar y alcanzar todas mis metas, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y en armonía con sus planes cósmicos. Soy inmune e invulnerable a las influencias y sugestiones del medio ambiente y de cualquier persona a nivel físico, mental, emocional y espiritual, en las dimensiones objetivas y subjetivas y en cualesquiera otras en que sea requerido.

13. El orden universal de la Vida, del amor, de la luz, de la sabiduría, del perdón, de la percepción de la verdad, de la aceptación de la realidad, de la justicia, de la igualdad, de la compensación, de la fortaleza, de la templanza, de la belleza, del equilibrio, de la armonía, de la salud, de la prosperidad, de la riqueza, de la abundancia, del servicio y de la provisión se establece en mi vida, en todos mis asuntos y en las personas interrelacionadas, aquí y ahora. Hecho está.

14. Asumo la responsabilidad de mis actos y cumplo bien todos mis compromisos, siempre oportunamente, de acuerdo con el orden cósmico.

15. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos da abundancia y armonía en el eterno presente. Vivo en abundancia y en armonía perfectas, aquí, ahora y siempre.

16. El Creador Universal, -ELOÍ-, se está ocupando de todo, en todos los aspectos de mi vida, y se expresa en mí conciencia intuitiva por medio de los sentimientos en correspondencia con los valores universales.

17. Gracias, Creador Universal, -ELOÍ-, por esta vida maravillosa. Que Tu Inteligencia Infinita, Amor, Sabiduría, Justicia, Luz, y Poder Creador guíen, adecuadamente, todas mis decisiones y acciones, ahora y siempre. Gracias, Eloí, por este día maravilloso.

18. El Creador Universal, -ELOÍ-, nos proteja, aquí y en cualquier lugar, ahora y siempre. (Tres veces).

19. Siempre espero lo mejor, de acuerdo con la voluntad del Creador Universal, -ELOÍ-, y la Ley Cósmica, en armonía con todos.

20. Gracias, Creador Universal; todo va bien en todos los aspectos de mi vida, a nivel físico, mental, emocional y espiritual. Gracias, Eloí, todo va bien en mis practicas espirituales y en mi relación Contigo; Tú y yo formamos una unidad perfecta, armónica, aquí y ahora, en el eterno presente. Yo soy Tú, Tú eres yo. Te amo.

21. Voy a realizar –obtener o resolver- (mencionar), antes del: (fecha), de acuerdo al orden divino y en armonía con todos. (Si se trata de varios objetivos, anótelos y haga la afirmación y visualización con cada uno de ellos. Imagínelo concluido satisfactoriamente sin imponer canal alguno de manifestación.)

22. Tengo serenidad y calma imperturbable. Soy impasible frente a todo y a todos. No tengo temor a nada, a nadie ni de nadie en ningún nivel físico, mental, emocional, espiritual y financiero. Dentro de mí vibra la seguridad total. Tengo completa confianza en la vida y en mi propia capacidad de resolver situaciones y alcanzar los resultados satisfactorios que preciso, en cada caso, siempre.

A continuación anoté la fecha: Lunes 12 de agosto de 1967. Luego, tal como me lo indicó el Venerable hombre, anoté la fecha que correspondía veintidós días después: 03 de septiembre de 1967.

Acto seguido, me senté cómodamente, tomé tres respiraciones profundas y realicé la meditación.

Luego, cada noche, durante veintidós días, a las once en punto, me iba a mi cuarto, daba indicaciones de no ser interrumpido durante veinte minutos y realizaba la meditación del día, la cual, siempre complementaba con la lectura breve de uno de los libros de cabecera que siempre suelo tener en mi mesa de noche.

Iba notando, día a día como emergía de mi interior una nueva y desconocida fortaleza, seguridad, estado de ánimo contento, actitud más decidida, optimismo frente a la vida y a las situaciones; comencé a llevarme mejor en las relaciones con las demás personas, a ser más comedido en todo y sobre todo comenzaba a tener conciencia de cosas que antes me solían pasar desapercibidas.

Cabe destacar que, en el punto número veintiuno de la meditación, había anotado siete objetivos que desde hacía tiempo quería realizar y para mi sorpresa, treinta días después de haber terminado de efectuar la meditación del manuscrito número veintidós comencé a observar como, en forma aparentemente casual se iban manifestando la resultados de cada uno de ellos hasta que, algunos meses después, antes de la fechas previstas, los había realizado todos, menos dos, por lo cual, me senté y volví a anotar, en una hoja de mi cuaderno, otros diez objetivos, encabezados por los dos pendientes de la lista anterior, les puse la fecha tope a cada uno, antes de la cual debían ser logrados, para seguir visualizando, su logro, periódicamente.

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martes, 16 de septiembre de 2014

TERCERA EPÍSTOLA A SOPHÍA


TERCERA EPÍSTOLA A SOPHÍA

©Giuseppe Isgró C.

Apreciada Sophia:
Gracias, por su carta y sus comentarios.
A continuación le comento los aspectos relativos a sus planteamientos:
Usted me pregunta: -“Por qué es contraproducente hacer confidencias a una persona allegada, acerca de los propósitos que queramos realizar?”
·                    Salvo las excepciones válidas, en cada caso, como las de informar a personas vinculadas, (a quienes se está, por deber moral, obligados de contar determinados proyectos que les involucre, con la verdad por delante, sea cual fuere), como el cónyuge, los hijos, u otros familiares, un socio, una persona con quien se vaya a contraer matrimonio u otra clase de compromiso, como noviazgo, etc., personal o comercial, es preferible ser reservados en los proyecto, por las siguientes razones:
·                    PRINCIPIOS GENERALES:
A) Sea quien fuere la persona que se le comente el proyecto que se desea realizar, instantáneamente se activan fuerzas contrarias, o antagónicas, cuya resistencia inherente se asemeja a un campo de fuerza adversa que será preciso dominar como un “handicap” extra. Es decir, para realizar el mismo proyecto costará más esfuerzo lograrlo con éxito si se comenta, sin importar quien sea el, o la confidente, -salvo los casos de rigor, y las excepciones que luego analizaremos-, que si se mantuviese en silencio, o en secreto.
·                    Podría decirse, como una constante: Si se habla del proyecto, dejará de realizarse.  
·                    Si el proyecto que se desea llevar a cabo es muy importante, es preferible no decir nada a nadie; salvo, por supuesto, las muy pocas, y puntuales, excepciones.
B)                     A nivel mundial, muchas personas se han dado cuenta de este principio, razón por la cual, mantienen sus proyectos en silencio, mientras estén, aún, por concluir exitosamente. Esa es la regla: Hasta no realizar algo, no decirlo a nadie. Después ya no importa, por cuanto el objetivo está logrado.
·                    En el argot popular se suele decir: -“En boca cerrada no entran moscas”-. En algunos sentidos, esto tiene alguna vinculación. Hemos mencionado, en diversas partes, que: La naturaleza trabaja en silencio; es preciso emularla.
2.         Mientras mas allegada sea  la persona, más fuerza antagónica genera.
·                     Esto se explica por cuanto la persona más allegada puede tener más intereses en contra de la realización del proyecto;  pongamos unos ejemplos:
A)                En el caso de un joven con sus padres: Éste le cuenta sus proyectos, -de la índole que fueren-. Ambos progenitores, o uno de ellos, enseguida comienza a pensar en los peligros, imaginarios o reales, que su hijo, o hija, correrá, y en silencio, o por medio de la persuasión, comenzará(n) a sabotearle para que no realice su proyecto, sugiriéndole una enorme cantidad de razones en contra, -que de todas maneras, casi siempre, dándose el caso, hay que tomar en cuenta, porque muchas veces son realistas. Hay excepciones a la regla, y estos constituyen el 20% de los casos, sin que por ello, se deje de activar la fuerza antagónica en contra. Lo que ocurre es que el joven se impone sobre la resistencia y frente a las evidencias de que nada doblegará su voluntad, los demás se ven obligados a respetar su propósito. Pero, hubo un combate entre fuerzas, y se sigue manteniendo, aún, en el tiempo, lo que está acallada es la voz antagónica, pero tan pronto el joven tenga un pequeño tropiezo, emerge enseguida, diciéndole: -“Hijo, no te lo dije yo que no te metieras en eso, y un largo etcétera que cada quien ha oído, u observado, muchas veces.
 Pero hay cualquier clase de variantes, y los padres suelen tener muchos intereses ocultos en relación con los hijos. Asesorando a un gran número de personas, en el ámbito de nuestra actividad como consultor jurídico-inmobiliario, hemos podido observar casos que son inauditos. Esa es la razón por la cual se dice: -“Una cosa es lo que piensa el burro y otra quien lo arrea”-.
B) El hombre le cuenta a la esposa que piensa desarrollar un proyecto a nivel nacional, o internacional: lo que le significará tener que viajar, constantemente. En este caso, la esposa se la ingeniará, sutilmente, disuadiéndole para que no haga tal cosa, con miles de imaginarias circunstancias, o reales, tal vez, cuyos efectos maximizará. El temor del riesgo de las “aventuras” que podrá tener el hombre, -en las cuales él ni siquiera ha pensado- generará fuerzas adversas en contra del proyecto, a nivel objetivo, y al subjetivo: Invisible y/o mental. (Psicoquinesia, o telequinesia, es decir, la acción de la mente a distancia, por medio de la imaginación, del temor y de las expectativas negativas. Por supuesto, en personas positivas al 100%, se activan fuerzas  creadoras favorables).
C)     La esposa le cuenta al esposo su proyecto –de la índole que fuere-, y él se va a representar, mentalmente, que si la señora tiene éxito va a adquirir excesiva independencia, y él perderá poder sobre ella.
·  O bien, el desarrollo del proyecto significará viajar, salir, visitar gente, todo ello le da más independencia a la señora, posibilidades de aventuras, entre otras cosas, entonces él comenzará a sabotearle, con muchas sutilezas, con tacto y habilidad, en los más recatados; en otros, con la imposición poco respetuosa, y hasta rayando en poca cortesía. (Por supuesto que, hoy en día, la mujer es más independiente que antes, pero, salvo excepciones, el principio sigue siendo válido, porque tenemos al mismo hombre, y a la misma mujer, en el fondo).
·  Hemos visto, también, todas clases de variantes, por supuesto muchas de ellas inimaginables, que no merece la pena reseñarlas. Cuestión de egoísmo, tal vez, o de ausencia de amor, o simplemente de confianza en sí.
D)            Al mismo tiempo se suelta la imagen del proyecto que se desea realizar:
·             Al hablar del proyecto que se desea ejecutar, se suelta la imagen del mismo, y otras ideas van a suplantarle en la mente, y éstas son las que van a activar las fuerzas regidas por la ley de atracción.
·             Estas otras ideas son las antagónicas que en forma verbal, o telepáticamente, las personas a quien se les comunica el proyecto, comienzan a enviar, sistemáticamente, a veces hasta muchos meses después, o años. (Hay numerosas observaciones al respecto).
·             En algunos casos, es de tal magnitud la reacción antagónica, y tan notable, que se hace preciso usar esta estrategia: En conversación normal con la persona a quien se le contó el proyecto, como quien no quiere la cosa, se le dice: -Oye, sabe que desistí de aquel proyecto que te había contado; llegué a la conclusión de que no valía la pena. Acto seguido se pasa a otra cosa. Pese a lo cual, no dejarán de ser reveladores los comentarios de la otra persona. En todo caso, se notará como aquella persona experimenta un “alivio” al saber que usted se ha dejado de eso. (Realizando el proyecto, el amigo, o la amiga, sale del montón del cual él forma parte. El egoísmo tiene muchas vertientes ocultas de expresiones).
E)      Si no se habla, se mantiene la idea en la pantalla mental, con mayor posibilidad de lograr el éxito en el proyecto.
·  Pese a todo, es preciso escribir los objetivos, para darle carácter de permanencia, practicar la autosugestión, para fijarlos en la mente objetiva, y transferirlos en la subjetiva, -ordenador mental, y visualizarlos ya realizados, en su etapa culminante, sin anteponer canal de manifestación alguno, dejando a la mente psiconciente encargada del logro.
·  Esto quiere decir, que hay que dejar que la vida traiga el resultado por el canal que ella –por la ley cósmica- lo crea mejor, sin imponerle que sea obtenido a través de un conducto determinado, que podría ser el inadecuado. La sabiduría de la vida es infinita.
F)      Es decir: de por sí, las ideas suelen saltar de la pantalla mental, con facilidad, pero, se sueltan totalmente al hablar de los proyectos. Entonces, el esfuerzo por sujetarlas, es mayor, y se corre el riesgo de no llevar a cabo el proyecto.  Al hacerlo, la mente lo aleja de su centro de poder, que es la imagen en la pantalla mental, donde crea un campo de fuerza magnética que atrae a los elementos coadyuvantes y repele a los contrarios, por la ley de atracción cósmica.
G)     LA IMAGEN EN LA PANTALLA MENTAL: si la idea del proyecto permanece constantemente, allí, por la rememoración continúa, por la imaginación del proyecto realizado, visualizándolo, etc.; dado que las imágenes tienen fuerzas de atracción y de repulsión, si las mantenemos en la mente, relativas al proyectos, ellas son como un imán: Atraen a los elementos análogos y coadyuvantes a su logro, y repelen los contrarios.
·       El centro de poder es la pantalla mental, las semillas son las ideas del proyecto, y las ideas son, a la vez, imágenes mantenidas en la pantalla mental. Son fuerzas, de doble polaridad, que atraen como un imán.
·       Atraen las mismas cosas que se piensa o se siente, o se imagina, o se teme. Lo semejante atrae lo semejante. Los opuestos jamás se juntan. El aceite se mezcla con el aceite, el agua con el agua. El aceite y el agua no se mezclan, aunque estén juntos.
H)      Quiere decir que cuando deseamos realizar un proyecto, la mente lo atrae, pero si lo comentamos con alguien, la mente lo aleja? Por qué? Por lo siguiente:
PRIMERO: Al hablar del proyecto, la idea del mismo sale de la mente, Se suelta, y otras pasan a ocupar su lugar, y cuesta volver a reubicarla. (Hasta se llega a olvidarse de ella).  Es algo que se puede observar con un poco de atención. Al salir la idea de la mente, donde fungía de imán, deja de atraer a los elementos coadyuvantes inherentes. Es decir, se alejó la idea del centro de poder que es la pantalla mental, donde, al centrar la atención en la misma, se expande la conciencia sobre ella, y se activa el poder creador, tanto para su realización, atrayendo a los elementos coadyuvantes, como, también, un medio protector, aislando los elementos antagónicos, esa es la razón por la cual, a la fuerza de repulsión se de denomina: Ley de aislamiento cósmico.
SEGUNDO: La fuerza antagónica que se ha creado, es un poder adverso que va a obstaculizar la realización del proyecto, lo cual significa que habrá de emplearse más a fondo para realizarlo, pero, la mayoría de las veces, deja de hacerse.
·                          Entonces, por qué correr riesgos? Es mejor realizar los proyectos emulando a la naturaleza; en silencio. De esta manera, uno se asegura de que no interferirán fuerzas antagónicas que habrá, luego, que vencer, con un esfuerzo extra.
El libro Cómo desarrollar la Auto-Maestría, en sus dos primeros capítulos habla de este aspecto, y de otros inherentes, pero las ideas son, en esencia, las reseñadas aquí.
Entonces, surge la pregunta: -A quién podemos comentar nuestros proyectos?
·                   A LOS ASESORES PROFESIONALES: Están acostumbrados a ayudar a la gente a alcanzar sus propósitos, de cualquier índole. Generan fuerzas positivas y estimulantes. Hay que elegir bien al asesor, sea cual fuere el área inherente. Siempre es bueno centrar la atención sobre el paso en que se desea recibir la cooperación, sin entrar en detalles sobre el proyecto total, que debe permanecer en reserva, aún con los expertos.
·                   A los socios, a los usuarios, a la gente interesada en el proyecto, quienes sí van a prestar su concurso para su logro. Con todo, hay que hacerlo, cuando ya se haya consolidado y esté firme, y siempre, hablando de un paso a la vez, sin revelar la meta final a nadie.
·                   Hay excepciones, que cada quien sabrá cuales son.
       Es preciso mantener en silencio, también:
 1) Cuando el proyecto atraviesa por sus fases críticas o menos fáciles. No hay que hablar de ellas con nadie, ya que ello maximiza los efectos negativos. Hay excepciones: las personas de las cuales se precisa ayuda, -y sin entrar en detalles-, dando por hecho que todo está bien, ya que, si la persona no tiene confianza, cómo la va a estimular en los demás?
·                   Los problemas, son la salsa de la vida, los que mueven el mundo, y le dan sentido direccional a la existencia. Esto quiere decir, que si no hubiesen situaciones por resolver, no existiría la vida. Por lo cual, las situaciones por resolver, suelen constituir  las mayores oportunidades que la vida aporta, al igual que la nuez dentro de la cáscara.
·                   Las situaciones y los proyectos, en todas sus variantes, expresan el poder potencialmente infinito que posee el ser humano, siempre que los atienda, los asuma y los afronte, sin abandonar a mitad del camino, siguiendo hasta haberlos resuelto, o alcanzado.  
·                   En el momento en que cada quien se niega en abandonar, se activa el poder creador de la mente, y comienzan a surgir las coincidencias coadyuvantes a la solución o al logro, respectivamente.
Aquí pasa algo similar con los proyectos, pero en sentido inverso:
·                   Cuando hablamos de las situaciones por resolver, en sus fases menos fáciles: Una persona escucha el relato de los problemas, los maximiza, y luego, lo cuenta a otra, y ésta, a su vez a otra, y así sucesivamente. (Cada persona tiene un promedio de 250, o más, interrelacionados, por lo cual, en pocos días, pueden conocer esa situaciones miles de personas, con solo contar el caso a una amiga, o amigo, de estrecha amistad).  Cada una los maximiza más, se los supone más grandes de los que son al hablar  y al imaginarlos los crea por el principio de donde se centra la atención se expande la conciencia y el poder creador. Se va creando un campo de fuerzas abrumadoras en un gran número de personas comentadoras, quienes, centrando la atención en la que contó, originalmente, la situación, las recibe, telepáticamente, las cuales son fuerzas adicionales que tiene que vencer. Es el mismo principio: Donde centramos la atención, se expande la conciencia, y se activa el poder creador.  
·                   Si se centra la atención en los problemas, se activa la ley de atracción en ellos. Si se centra la atención en la solución, o en los objetivos, se canaliza positivamente, tanto las ideas obtenidas por la lógica inductiva y deductiva, como por la intuición y la inspiración, sobre el qué, el cómo, el cuándo, el dónde, el quién, el cuánto y el por qué, así como la fuerza creadora-motivadora inherente y suficiente a la magnitud de cada caso. Pero, en ambas vertientes, el silencio es creador, coadyuvante, y positivo, para cualquier persona.
·                   Probablemente, el problema ya esté resulto a los tres días, y, sin embargo, varios meses después, ese grupo de personas por donde ha circulado la información, probablemente sigan pensando que la que lo contó, lo siga teniendo, y muchas de ellas, hasta se le pueden alejar, ya que, un buen número de personas no quieren tratar con quienes tienen problemas, salvo excepciones.
·                   Esto puede afectar, también, el crédito personal. Cosas de humanos.
DESGASTE DE ENERGÍA:
·        Hablar de los propios objetivos, o situaciones desgasta la energía.
·        Activa la atención a nivel objetivo, y aquí está el verdadero secreto: Conversar, necesariamente, retrae a la persona a la dimensión objetiva, sustrayéndola de la dimensión subjetiva, que es donde se encuentran los poderes creadores de la mente; es decir: En el interior.  
·        Por eso se dice que para conectar con la Divinidad es preciso descentrar la atención del ego, e interiorizarla en el yo interno, y desde este centro de poder, conectarla con la fuente. En esa dimensión interior, creadora, sosegadora, inspiradora, se activan las ideas y las fuerzas coadyuvantes.
·        Por todo esto, es preciso hablar solo de cosas positivas, y cuando alguien cuenta cosas negativas de otros, atajarle, sugiriéndole: -Háblame de todo lo bueno que sepa de otros, nada negativo y salir de ese círculo cuanto antes.
·        Otro punto, es el de la conveniencia de no hablar sobre la salud. Sea cual fuere el estado en que la persona se encuentre, siempre debe decir que está bien; luego, cambiar de tema, enseguida.
Sophia, he colocado estas breves  ideas tal como han surgido. De haber algún aspecto adicional, será un placer comentarlo. Es un tema muy interesante.
Adelante.


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